Se trata de la cuarta amenaza que recibe un referente de la izquierda en las últimas dos semanas. Aunque descartaron que los hechos estén asociados, la Policía investiga.
La ministra española Reyes Maroto, titular de la cartera de Industria, Comercio y Turismo, recibió una carta amenazante con una navaja ensangrentada, según informaron fuentes del gobierno de ese país.
Este hecho se suma a las otras tres cartas que la semana pasada recibieron en el Ministerio del Interior con cartuchos de balas.
A diferencia de las primeras tres, que fueron enviadas desde un buzón al aire libre sin remitente, la nueva amenaza, dirigida esta vez a Maroto, llevaba un nombre en el remitente, tal y como ella misma ha informado a las puertas del Congreso de los Diputados tras formalizar la denuncia en el Comisaría de la Cámara Baja.
Según precisaron allegados a la investigación, para eludir los controles de seguridad, el sobre que llegó a manos de la ministra también incluía dos CDs para “evitar que la navaja apareciera en el escáner”. En el interior del sobre de tamaño folio, además de la navaja había “un montón de folios grapados con copias ampliadas de mensajes de WhatsApp y Twitter”. También otro folio manuscrito en el que habría escritas “palabras y frases sueltas” de las que no han trascendido más detalles.
Tan pronto como se conocieron los hechos, la Policía local comenzó a investigar si la información suministrada en la misiva se trataba de una identidad falsa o no. Más tarde, los agentes comprobaron que la persona que envió el paquete a la ministra se correspondía con la identidad que aparecía en el remitente de la carta: él mismo dejó el rastro con su nombre, apellidos y dirección. Según afirmaron, se trata de un vecino de El Escorial (Madrid) con problemas de salud mental, por lo que no ha sido detenido y se espera por un juicio.
Amenazas sin relación
Los investigadores apuntaron que el sujeto en cuestión no tendría nada que ver con las otras tres cartas que la semana pasada recibieron el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, y a la directora de la Guardia Civil, María Gámez.
En el mensaje dirigido al ministro del Interior se podía leer: “Tienes diez días para dimitir. El tiempo de reírte de nosotros se ha terminado. Policía Nacional. Guardia Civil. El tiempo lo tienes en contra para los taponazos”. En España, coloquialmente “taponazos” significa disparos.
En tanto, la amenaza dirigida a Pablo Iglesias decía: “Has dejado morir a nuestros padres y abuelos. Tu mujer, tus padres y tú estáis sentenciados a la pena capital. Tu tiempo se agota”.