El gesto de Moscú fue interpretado como “echar gasolina al fuego”.
De acuerdo a la información suministrada por el periódico turco Karar, durante las últimas horas cuatro buques de guerra rusos pasaron por los estrechos de Dardanelos y Bósforo rumbo al Mar Negro. Por otro lado, a esa escalada de las tensiones en la frontera con Ucrania acaba de sumarse un anuncio de Reino Unido. En el mes de mayo, señalan altos funcionarios británicos, enviarán dos buques de guerra de la Royal Navy también hacia el Mar Negro.
Dado que la flota rusa en el Mediterráneo regresa rutinariamente a los puertos del Mar Negro para abastecimiento o mantenimiento, el paso de barcos militares rusos por el Bósforo es frecuente. Sin embargo, en el marco del despliegue de las tropas sobre la región de Donbás y las advertencias de la OTAN y el G7, el paso de cuatro buques en solo dos días fue interpretado como un gesto de “echar gasolina al fuego”. El Kaliningrad y el Korolev, dos de las naves que pasaron del Egeo al Mar Negro, son buques anfibios del tipo Ropucha.
Según la información del periódico The Sunday Times, el anuncio estratégico del Reino Unido lleva explícita la advertencia de sumar buques, aviones y submarinos en caso de alguna amenaza de las fuerzas rusas. En declaraciones frente al mismo medio, un portavoz del Ministerio de Defensa de Reino Unido ha declarado que su país y aliados internacionales quieren mostrar su apoyo “inquebrantable” a Ucrania. De la misma manera, la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, Emmanuel Macron, solicitaron enfáticamente que el gobierno ruso cese su despliegue militar en esa frontera.