El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de Valencia, analiza la aplicación de herramientas de patología digital en modelos tumorales artificiales.
Un grupo de científicos concentró sus estudios en la tecnología 3D, para conocer la conducta de aquellos tumores que provocan cáncer en los infantes. Así, analizan la aplicación de herramientas de patología digital en modelos tumorales artificiales.
El Instituto de Investigación Sanitaria INCLIVA, del Hospital Clínico de Valencia, indicó que a través de este estudio buscan conocer el comportamiento de los tumores, concretamente las células de neuroblastoma, en cuanto al crecimiento, agresividad y migración celular. Es de este modo que el Instituto plantea hacer uso de la tecnología 3D para mejorar los tratamientos del cáncer infantil y avanzar en la lucha contra este.
Esta iniciativa es parte del trabajo enmarcado dentro de la tesis doctoral de Ezequiel Monferrer, el cual publicaron también en el International Journal of Molecular Sciences, debido a que podría ayudar a combatir el cáncer infantil con ayuda de la tecnología 3D. Explicaron que el llamado neuroblastoma se genera a partir de unas células del embrión formadas por los ganglios simpáticos y la médula suprarrenal, por eso aclaran que se trata de uno de los tumores más frecuentes en la población infantil.
Los investigadores de INCLIVA junto a Monferrer intentaron recrear con esta tecnología el neuroblastoma para estudiar su comportamiento. Por ello se llevó a cabo un cultivo de células del neuroblastoma junto a otras no cancerosas, para así formar el conjunto tumoral y recrear la relación entre las células del tumor y su entorno.
Ezequiel Monferrer detalló: “Desde que el proyecto está en marcha, hemos desarrollado diferentes modelos 3D con tecnología de bioimpresión tridimensional en base a tumores de pacientes. Estas estructuras están formadas por gelatina y alginato metacrilado y sirven para recrear los entornos tumorales, con distinta rigidez y que están sometidos a diferentes interacciones”.
Asimismo, señalaron que en los resultados evaluados pudieron observar que el entorno influye enormemente en la proliferación celular, la producción de vitronectina y la expresión de genes relacionados con la migración. La investigación mostró también cómo la presencia de células no cancerosas en los cultivos bioimpresos en 3D modificaba el comportamiento de las células tumorales.
El doctor Antonio Llombart, vicepresidente de la Asociación Española Contra el Cáncer en Valencia, explica: “Estas investigaciones son fundamentales para disponer de modelos bien caracterizados que imiten distintos tipos de neuroblastoma en los que poder realizar ensayos terapéuticos preclínicos y trabajar en posibles tratamientos para reducir su agresividad”.
Finalmente, concluyeron en que este estudio destaca la importancia y capacidad de la tecnología de bioimpresión 3D para muchos ámbitos sanitarios, en especial el del cáncer infantil.