Acuerdo YPF-Chevron: un secreto vergonzoso

En una muestra más de cómo la impunidad suele ganarle paso a la verdad en nuestro país, la Justicia dio lugar a la apelación que efectuó YPF para que se mantenga bajo confidencialidad las cláusulas del acuerdo firmado con la empresa estadounidense Chevron bajo el gobierno kirchnerista.

Según la Justicia, que le dio razón a  la empresa y contó para eso con el apoyo de dirigentes macristas como la titular de la Oficina Anticorrupción Laura Alonso, no se puede dar a conocer públicamente el vínculo con la multinacional petrolera por la importancia que tienen sus artículos en materia de valor geológico, económico e industrial.

La decisión judicial estuvo a cargo de la magistrada María Cristina Carrión de Lorenzo, lo que hace que la demanda iniciada por el entonces senador socialista Rubén Giustiniani con el apoyo de Fernando “Pino” Solanas, vuelva a la Cámara Nacional en lo Contencioso Administrativo, que en un primer momento había fallado a favor de la compañía.

Giustiniani había pedido en 2014 a la empresa una copia del acuerdo basándose en el derecho de acceso de información pública, pero tras la negativa de la compañía el legislador acudió directamente a la Corte Suprema, que le dio la razón.

En su reciente apelación, YPF había insistido con que la inversión de Chevron "cumple con todas las normas legales aplicables y en ningún caso se han utilizado sociedades constituidas en paraísos fiscales de acuerdo con lo dispuesto por la normativa de la República Argentina".

Mientras tanto, sectores políticos que apoyan la iniciativa de Giustiniani comenzaron a juntar firmas en una plataforma web para solicitar a YPF que dé expreso cumplimiento a lo dispuesto por la Corte Suprema de Justicia de la Nación y entregue el contrato firmado con Chevron sin ningún tipo de enmienda.