El Gobierno intenta “seducir” a dirigentes opositores

Luego de que el senador nacional Luis Juez diera a conocer su intención de renunciar a la presidencia del bloque del PRO, con el objetivo de concentrarse en la campaña a gobernador de Córdoba para el 2027, en el oficialismo comenzaron a mirar con buenos ojos atraer a otros aliados de cara a las elecciones legislativas de este año.

En esta línea, con las elecciones de medio término a la vuelta de la esquina, desde el Ejecutivo comienzan a analizar posibles nombres del PRO que podrían sumarse a las filas de La Libertad Avanza (LLA) en los próximos meses.

Cabe señalar que, los nombres que más suenan en Casa Rosada son los de Diego Santilli y Cristian Ritondo. El primero, fiel seguidor de Mauricio Macri, estaría más cerca de ser un candidato de consenso entre los espacios. Asimismo, están muy presentes algunos intendentes del PRO que son bien vistos por el oficialismo, como Guillermo Montenegro (General Pueyrredón), Diego Valenzuela (Tres de Febrero), Ramón Lanús (San Isidro), o Santiago Passaglia (San Nicolás).

Sin embargo, la posibilidad de agregar soldados a las filas de LLA, no solo depende del partido liderado por Mauricio Macri. Luego de los diversos debates legislativos, el oficialismo logró aliados clave en el radicalismo y en el peronismo no kirchnerista. En la UCR, luego de los vetos, hubo un quiebre que generó que algunos de ellos sean calificados como “radicales con peluca”. Estos son Mariano Campero, Luis Picat, Martín Arjol y Pablo Cervi. El mayor exponente de este grupo podría ser el ministro de Defensa, Luis Petri. Además, una serie de legisladores de la UCR se reunió con los hermanos Milei en Casa Rosada.

Por último, vale señalar que a varios de ellos se les termina el mandato en este año y estarían libres en caso de querer formar una alianza y sumarse al partido libertario.