La motosierra libertaria y sus consecuencias en las emergencias sociales

En una semana marcada por la catástrofe sufrida en la ciudad de Bahía Blanca, la administración libertaria implementó una serie de medidas que generaron fuertes críticas de varios sectores, especialmente en el área de asistencia social.

Cabe señalar que desde el inicio de la gestión del Presidente Javier Milei se despidieron a miles de trabajadores y se cerraron diversas áreas claves del Ministerio de Desarrollo Social, vaciando dependencias completas como la Secretaría de Economía Social y la Dirección Nacional de Emergencias.

En esa línea, de las 6.700 personas que trabajaban en el Ministerio de Desarrollo Social, cerca de 3.800 fueron despedidas, lo que representa más del 50% de su personal. De este modo, se eliminaron varias áreas que brindaban apoyo directo a las familias más vulnerables, como la Subsecretaría de Políticas Sociales, que se encargaba de asistir en emergencias, y la Subsecretaría de Economía Social, que apoyaba los emprendimientos de la economía popular.

Uno de los efectos más inmediatos de estas decisiones fue la eliminación de políticas de asistencia directa, como los programas que apoyaban a los sectores más necesitados en contextos de emergencia, como los que viven los habitantes de Bahía Blanca en estas horas.

Así, el resultado de la política de ajustes con las cuales el Gobierno busca reducir el tamaño del Estado y eliminar sectores que podrían resistir sus políticas económicas, toma una mayor dimensión al ver el su peligroso alcance en un contexto de crisis social.