Murió en La Plata “Chicha” Mariani

Estaba internada desde hacía diez días tras haber sufrido un ACV. La despiden hoy, en calle 56 entre 12 y 13.

A los 95 años y tras más de 40 de búsqueda para encontrar a su nieta Clara Anahí, arrebatada por los genocidas de la última dictadura militar, falleció en nuestra ciudad la fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo, María Isabel Chorobik de Mariani. Estaba internada desde hacía diez días tras haber sufrido un ACV. La despiden hoy, en calle 56 entre 12 y 13.

Hasta el 24 de noviembre de 1976, “Chicha” era docente del secundario. Desde esa noche, su vida cambió para siempre: en un megaoperativo de un centenar de represores del Ejército y la Policía Bonaerense fueron acribillados dentro de una casa ubicada en la calle 30 al 1116 de La Plata Diana Teruggi, la nuera de Chicha, y otros cuatro compañeros. De esa vivienda y tras ese operativo la patota se llevó a Clara Anahí, de tan solo tres meses, con vida. Al padre de Clara Anahí e hijo de Chicha, Daniel Mariani, los militares lo encontraron y asesinaron en agosto de 1977. 

Para entonces, y después de recorrer instituciones y hospitales, de hacer averiguaciones de manera individual, Chicha comenzó a intentar ponerse en contacto con mujeres que estuvieran en su misma situación. Supo de la incipiente existencia de Madres de Plaza de Mayo, y, junto a otras once mujeres, fundó en noviembre de 1977 Abuelas de Plaza de Mayo.

En 1989 dejó la institución y creó la Fundación Anahí, desde donde continuó la búsqueda de su nieta. 

Convirtió la casa de la calle 30, cuya fachada continúa agujereada tal cual la dejaron los genocidas, en museo. Hasta poco antes de su muerte, no se cansó de rogar a los represores que dijeran lo que sabían del paradero de su nieta. Que aportaran un dato. Soportó que un genocida como Miguel Osvaldo Etchecolatz le dijera que sabía dónde estaba Clara Anahí, sin decirle más palabra. 

Murió en la lucha, en la búsqueda y en la esperanza de que su nieta “va a aparecer, aunque yo no la vea”.