Según un informe, hubo una enorme transferencia de ingresos desde los trabajadores al sector del capital, tasada en $13,2 billones.
15/11/2024 - 00:00hs
Además del coeficiente de Gini, cuyos datos sobre el segundo trimestre del año arrojó que la desigualdad en Argentina creció, otra de las maneras de dar cuenta la distribución del ingreso es la división entre el capital (el sector empresarial) y el trabajo (los asalariados) sobre el PBI. Según un estudio del Mirador de la Actualidad del Trabajo y la Economía (MATE), la participación de los trabajadores en el producto nacional bajó desde el 2016, lo que significó una transferencia de 290 mil millones de dólares al capital.
“La tendencia iniciada durante el gobierno de Macri se consolida ya que los asalariados se quedan con una menor proporción del producto nacional”, señaló el documento, que compartió un gráfico que muestra el reparto del PBI año a año. Luego de que los trabajadores alcanzaran el fifty – fifty con el último gobierno de Cristina Kirchner (mitad de los ingresos para los trabajadores, mitad de los ingresos para el capital), en el primer año de Macri la participación de los trabajadores en el producto nacional bajó al 48%. Actualmente, esa cifra disminuyó al 43%. Según los cálculos del centro de estudios, ese 7% que pasó a manos del capital privado significó una transferencia de 290 mil millones de dólares.
A su vez, la investigación destacó que el porcentaje de participación del salario en el PBI se ubicó en 45% a fines del 2023. Su caída al 43% en agosto de este año representó una transferencia de 24,5 billones de pesos al sector del capital.
“Esta ganancia extra del capital, al no invertirse internamente por la caída del mercado interno, busca dolarizarse y fugarse, volviendo más vulnerable la economía nacional”, alertó MATE.
Más datos del INDEC
En octubre, el INDEC evidenció que el coeficiente de Gini creció del 0,417 al 0,436 en el segundo trimestre frente al mismo período de 2023. Esta medición da cuenta de los niveles de desigualdad social: cuando su indicador se encuentra más cerca de 1, se habla de una sociedad extremadamente desigualdad.
Como resultado, el 10% de la población con mayor ingreso per cápita familiar concentró 33% del total del ingreso: 19 veces más que el 10% con menor ingreso.