A punta de pistola, dos hermanos asaltaron y golpearon a sus padres

Un matrimonio de jubilados dormía cuando fue sorprendido por dos ladrones que luego resultaron ser sus propios hijos, quienes estaban en busca de una herencia. Ocurrió en Pilar

"Abrí la puerta, soy yo, papá”, le dijeron a Enrique Arzeno (72) el jueves a la madrugada. El hombre estaba durmiendo en su casa de la localidad bonaerense de Manzanares, en Pilar. Todo continuó como la pesadilla menos pensada: Enrique y su esposa, Antonia (82), fueron brutalmente golpeados por sus propios hijos, encapuchados, mientras les exigían “la plata de la herencia”. 

La Policía detuvo por el ataque a los descendintes del matrimonio, que se negaron a declarar. Según informaron fuentes policiales, los aprehendidos tienen 34 y 36 años. Se trata de Claudio y Sergio Arzeno, quienes fueron capturados en una casa de José C. Paz ubicada en Matheu al 4.700. Ahí, secuestraron ropa con sangre y objetos que estaban en la casa de los jubilados. 

En un determinado momento, a uno de los ladrones se le descubrió el rostro y fue reconocido por su padre. Efectivamente eran sus herederos. Sin embargo, la violencia continuó hasta que ambos jubilados quedaron tirados en el piso. Luego, los delincuentes buscaron el dinero por el cual habían ido, pero al no encontrarlo se dieron a la fuga con algunos elementos de poco valor.

Los vecinos alcanzaron a llamar a la Policía y en una ambulancia trasladaron a las víctimas hasta la clínica Los Almendros, en Pilar, donde fueron atendidos.

El hombre sufrió diversas escoriaciones y politraumatismos, además de hematomas en todo el cuerpo. En tanto, su esposa presentó heridas similares y una fisura en el tabique nasal, pero en el momento de efectuarle una tomografía computada se pudo corroborar que la mujer había recibido un impacto de bala, cuyo proyectil ingresó por el parietal derecho y quedó alojado en un sector del cráneo.