Berisso: lo buscaban por un asalto y lo detuvieron por drogas
El operativo fue realizado por un robo agravado ocurrido en el pasado martes.
Como resistió al asalto, los delincuentes lo ejecutaron de un tiro certero y murió horas después en un centro de salud.
18/06/2020 - 00:00hs
Un colectivero de 43 años fue brutalmente asesinado frente a su esposa mientras esperaba que terminara de realizar las compras en un almacén cercano a su domicilio. Como resistió al asalto, los delincuentes lo ejecutaron de un tiro certero y murió horas después en un centro de salud.
El hecho se registró en horas de la tarde en la localidad bonaerense de Libertad, partido de Merlo. Según informaron las fuentes policiales, el hombre, identificado como Federico Rivero, estaba estacionado con su camioneta en el cruce de las calles Esquiú y Sucre, del barrio La Blanquita.
Allí aguardaba a que su mujer finalizara las compras en un supermercado de la zona, cuando fue interceptado por al menos dos sujetos con fines de robo. En ese momento se produjo un forcejo, y al intentar resistirse al asalto, ante la mirada de su esposa, uno de los delincuentes le efectuó un disparo que le produjo una herida de gravedad.
Tras perpetrar el ilícito, los cacos escaparon rápidamente del lugar con 500 pesos y el celular perteneciente a la víctima. Por su parte, el colectivero fue trasladado de urgencia al Hospital Eva Perón de Merlo, donde fue atendido por personal médico, pero murió tres horas después del ataque mientras era intervenido quirúrgicamente.
Por estas horas, los investigadores buscan a los dos malvivientes que se desplazaban en una moto negra y actuaron a cara descubierta.
Para dar con el paradero de los ladrones, será fundamental el análisis de las cámaras de seguridad del municipio que están distribuidas por la zona. La pesquisa quedó a cargo de la fiscalía de turno de Morón, que ordenó diversas diligencias para capturar a los asaltantes.
Rivero se desempeñaba desde hacía 18 años como chofer de la línea 322 de la empresa de colectivos La Perlita. Sus compañeros de trabajo lo recordaron con profunda tristeza y sostuvieron que era una gran persona. Comentaron que todas las mañanas arribaba en su camioneta a cumplir la jornada laboral porque no tenía transportes para llegar a Moreno.