City Bell y El Mondongo, tierra de delincuentes

Las últimas horas fueron angustiantes en la ciudad debido a la cantidad de robos que se vivieron en diferentes puntos y barrios, y todos bajo un mismo patrón: la impunidad, ya que la Policía no logró dar con ninguno de los implicados, quienes se mantienen prófugos.

En 21 A y 461 de City Bell sujetos desconocidos ingresaron a una casa, mientras su dueña descansaba. El suceso tuvo lugar alrededor de las 6, poco antes de que la víctima se despierte para ir a trabajar. Cuando lo hizo, notó que le habían sustraído algunos elementos de valor y también una moto Motorola que tenía apenas un mes de uso. Con el botín asegurado, los hampones se dieron a la fuga y nada se sabe de ellos.

“Tiene que estar pagando 40 cuotas por semana y estas mangas de ratas se lo afanaron”, se lamentó la hija de perjudicada, y agregó: “Ya basta de todo esto, de ver que los chorros arruinen así a alguien. Dos días atrás, en el mismo lugar, barretearon el auto de mi hermano y le robaron la batería”.

Impunidad total

A su vez, en el Mondongo y escasos metros de distancia se vivieron otros dos hechos de extrema inseguridad, cuando en 2 y 67 un grupo de malvivientes se apoderó de un ciclomotor, mientras que en 1 y 66 la víctima fue una mujer, a quien sorprendieron malhechores en bicicleta. Tras amenazarla con armas, le sacaron todo lo que llevaba encima y si bien algunos vecinos salieron a correr a los cacos, no pudieron alcanzarlos.

“El panorama es sórdido, angustiante. ¿Quién nos defiende?”, se preguntó un frentista, y otro dijo: “Hay una garita cerca, pero es del Municipio, no son policías, sino simples empleados municipales. No nos defiende nadie. Si nos roban frente a una garita de seguridad, estamos fritos”.