“Dice mucho que se haya suicidado en el Colegio Nacional”

La madre de Lara, la adolescente que se mató dentro de un aula frente a sus compañeros, rompió el silencio. También habló del bullying que existe en la institución educativa

El pasado 3 de agosto, Lara, una adolescente que asistía al Colegio Nacional, se pegó un tiro en la cabeza delante de sus compañeros, en plena clase. Tras cuatro días de agonía, falleció en el Hospital San Martín, donde nunca llegó a recuperar la conciencia. 

A un mes del hecho, su madre, Julissa, rompió el silencio y le contó a Infobae cómo lleva la pérdida. “Me costó ver que ella tenía su propio mundo privado. Evidentemente, tenía un mundo privado bastante preocupante y no estuve al tanto. Esa autocrítica me va a perseguir durante toda la vida”, indicó. Recordó a la adolescente como una persona “divertida, graciosa y creativa” y señaló: “En lo social no había tenido jamás ningún tipo de problema. Yo pongo la bisagra en nuestra vida hace unos dos años. Ahí empezaron a aparecer situaciones que me hicieron preocupar por su estabilidad emocional”. 

Como este medio informó, a Lara siempre le molestó el bullying que veía en el colegio. “A ella la molestaban, pero tampoco le gustaba ver cómo lo hacían con otros”, le había dicho a Trama Urbana su círculo íntimo. Ahora, su madre aseveró que cambió a su hija al Nacional, desde la Escuela Italiana, a la que asistía desde el jardín, y  allí arrancaron los problemas. “Lara no quería ir al Nacional y me lo dejó en claro. La primera semana, me dijo Mamá, esto es una selva. Hay un bullying terrible, son todos unos f... No se respetan entre los compañeros ni a los profesores. No es algo contra mí, pero en general se vive algo terrible”, contó Julissa.

En su última etapa, que coincidió con la época en que iba a su nueva escuela, Lara “había entrado en una fase de dibujos llamativamente oscuros. Ahora me cierra que tenía que ver con su estado de ánimo. En ese momento pensé que le gustaba el animé y el metal, y su estética es así. Me parecía normal en ese sentido. Pero en su expresión empezó a aparecer el caos”, expresó.

“Conexión que escapa a la física”

Acerca del día en que todo ocurrió, la mamá de Lara relató: “Me desperté a las 8, de la nada. Sentí algo muy extraño en mí. Habrá sido esa conexión entre madres e hijos, que le escapa a la física real. No pasaron tres minutos hasta que sonó el teléfono y me dijeron que vaya al Hospital San Martín porque mi hija había tenido un accidente y era grave. Pensé que había sido un accidente de tránsito, que estaba llegando tarde y que la habían atropellado. De hecho, durante el camino fui diciendo Que haya sido un auto y no un micro. Cuando llegué a la puerta del hospital, estaba mi papá, que me dijo: Se pegó un tiro”. Para Julissa, que su hija se haya matado en la institución educativa fue un mensaje: “Tuvo la posibilidad de hacer lo que hizo en la casa de su padre, que es grande y, aún así, eligió poner un arma en su mochila, con todo el riesgo que eso conlleva, dirigirse al colegio y dispararse delante de todos sus compañeros. Es algo que para mí no se puede pasar por alto. No lo hizo en la casa del padre, lo hizo en el Colegio Nacional y está diciendo mucho con eso. Estaba manifestando un enojo muy grande contra un lugar que tendría que haber sido su lugar de pertenencia”.