Él no habló; a ella la velan y la creman

El marido de la profesora de gimnasia asesinada en Gorina no declaró, pero su abogado dejó en claro su táctica de defensa. Peritaron nuevamente la escena del crimen

Las horas pasan, pero la conmoción perdura en el barrio, a la vez que la investigación avanza; ayer se llevó a cabo en la casa de Gorina donde se produjo el homicidio una serie de peritajes, mientras que el acusado de haber matado a su mujer se negó a declarar, informaron fuentes judiciales.

Pablo Cuomo, abogado del imputado Marcelo Raúl Núñez (44) junto a Pablo Corti, dijo que “a mi defendido le agarró un ataque de nervios y no está en condiciones psíquicas ni físicas para declarar. Está absolutamente destruido e ido”. Y agregó (dando muestras de la postura defensita a emplear) que “él sabe que la mujer estaba en el baño y después la vio tirada en el piso, por lo que llamó a un vecino y juntos la trasladaron al Hospital”. ¿Qué sucedió en el medio? No lo recuerda.

Núñez se encuentra desde la mañana del miércoles aprehendido y a disposición de Marcelo Romero, titular de la UFI 6. El fiscal caratuló la causa como “homicidio calificado por el vínculo y la violencia de género”. El mismo doctor fue quien ordenó que peritos de la Policía Científica regresen ayer a la escena del crimen, una bonita casa ubicada en 493, 132 bis y 133, para buscar nuevos elementos. “Se secuestraron celulares y una computadora de escritorio, elementos de valor para la causa, aunque sigue sin aparecer el arma blanca (sería un destornillador)”, revelaron desde tribunales.

La palabra del hijo

En diálogo con este medio, Lucas Núñez, hijo de Marcelo y de Claudia Salgán (40), la mujer asesinada a cuchillazos y ahorcada, aseguró que “lo que más preocupa ahora son mis hermanos (de ocho y 12 años, que quedaron bajo el cuidado de una abuela y no presenciaron el crimen)”. El joven se acercó ayer hasta el domicilio, donde charló brevemente con los dos policías que custodian el lugar para saber cuándo terminarían los peritajes y cuándo él podía ingresar a su propia finca. Ante Trama Urbana informó que “mañana (por hoy, de 8 a 10.30) la vamos a velar en Betty y después va a ser cremada. Ella no quería que la enterraran”. 

Conocido el final de su madre, escribió en Facebook: “mamita hermosa, te amo hoy y siempre. Desde arriba vas a vernos crecer; a los chicos nunca les va a faltar nada porque yo me voy a encargar. Nos vas a faltar mucho, ma. Dame fuerza para seguir con esto. Te amo, siempre voy a llevarte en el corazón”: 

Los vecinos se mostraron consternados con el aberrante y sangriento episodio. “Es una zona tranquila, silenciosa, es imposible imaginar que podría llegar a pasar algo así. Él (por Núñez) era muy respetuoso y trabajador, muy tranquilo. Tanto como su mujer, al menos desde afuera parecían personas normales”, manifestó un frentista que tiene su propiedad a pocos metros.   

Horacio García, amigo de víctima y victimario, declaró que “Marcelo nunca la había golpeado, nunca se habían registrado episodios de violencia entre ellos”, y pasó entonces a la agresión en sí. “La atacó cuando ella estaba desprevenida” y no dudó en afirmar que “la causa de la muerte fue el ahorcamiento; entró en paro cardiorrespiratorio a consecuencia de eso”. Por último, no pasó por alto un tema no menor: “Vivían en la misma casa pero estaban separados, aunque él no se quería ir. Ella le planteó la separación, pero en junio Marcelo tuvo un infarto y ella lo apoyó todo este tiempo, cuando él estuvo recuperándose y haciéndose controles cardiológicos”. 

El tiempo pasó, el hombre se recuperó y ella insistió con abandonar la relación, lo que habría generado la pelea que derivó en el femicidio. 

“Se me fue la  mano, la pinché con un destornillador”

Como adelantó diario Hoy en su versión digital de anteayer, el hecho se produjo a las 6.30 del miércoles, cuando discutieron Salgán y Núñez. Tras apuñalarla y estrangularla, la llevó a la guardia del San Roque, donde ingresó con “paro cardiorrespiratorio traumático”, por lo que tuvieron que realizarle maniobras de resusitación, con asistencia respiratoria mecánica, aunque falleció a las 18. Él regresó a la casa, donde le confesó a policías el hecho, aun con la ropa ensangrentada: “Se me fue la mano, me mandé un cagadón. La agarré mandándole un mensaje a un flaco. Se me pasó la mano y la pinché con un destornillador, la macana me la mandé yo. Me vivía metiendo los cuernos, me cansé de ella". Tomando en cuenta eso y los dichos de Florencia Cabrera, madre de la víctima, y de su hermana Lucía Salgán Cabrera (adujeron que había problemas en la pareja y que él la agredía), anoche el fiscal Marcelo Romero pidió la detención del sospechoso, hasta ahora encerrado pero en calidad de aprehendido, y deberá ser el Juez de Garantías, Pablo Masi, quien lo resuelva. 

Tiempo atrás, ella posteó sobre los femicidios  

Núñez y Salgán llevaban 23 años de casados, en los que construyeron una familia de cinco integrantes: ellos y sus hijos de 8, 12 y 23 años. Los dos primeros vivían con el matrimonio (él juega al rugby, ella estudia en el Liceo Mercante), no así el mayor, quien se mudó tiempo atrás con su novia. 

Salgán era una “reconocida vecina” de Gorina, profesora de educación física que tenía un gimnasio en 27, 495 y 496, donde brindaba clases de distintas actividades aeróbicas; Núñez trabaja en la empresa metalúrgica Federal Mogul y es un amante de las artes marciales mixtas, donde está bien posicionado en nuestra ciudad. 

Si bien los vecinos y allegados negaron una mala relación entre ellos, y desconocieron haber escuchado peleas previas, una alta fuente policial le reveló a Trama Urbana que “a palabras de la madre y la hermana de la víctima, el matrimonio atravesaba una grave crisis, e incluso había agresiones de por medio”, aunque no hay radicada denuncia alguna. El mismo vocero amplió el concepto: “cuando (Núñez) fue aprehendido estaba muy nervioso y presentaba heridas de reciente data en el rostro, compatible con rasguños. Poco después confesó que estaba cansado de los engaños de su mujer, y por eso comenzaron a discutir, la golpeó varias veces y le aplicó dos puntazos en el tórax con un destornillador”.

Marcelo Romero, titular de la UFI 6, aseguró que “desconocemos los motivos (del homicidio). Lo único positivo de este luctuoso acontecimiento fue que los hijos no estaban en la casa y, por ende, no fueron testigos”. 

Como una paradoja del destino, ella había compartido en su muro de Facebook en junio, antes de la multitudinaria marcha del “Ni una menos”, el posteo de un hombre chaqueño que revolucionó las redes sociales haciendo referencia a los femicidios.