Un ciclista provocó un accidente entre un auto y una moto en 137 entre 528 y 529
El conductor del vehículo explicó que para no chocar al ciclista hizo una maniobra y colisionó a una moto
La testigo relató un episodio en donde vio a su madre ensangrentada. Stella Sequeira fue vista por última vez en diciembre del 2016.
23/04/2021 - 00:12hs
En el marco del juicio oral que se le sigue de manera virtual al abogado Rubén Carrazzone por la desaparición de su mujer Stella Maris Sequeira, declaró ante el Tribunal Oral Federal n°2 de La Plata la querellante y única hija de la presunta víctima, Solange Ponzo.
“Mi mamá y Carrazzone vivían en la casa de atrás (la quinta tenía dos viviendas)”, aclaró la joven. Agregó: “Con el tiempo a mi madre le empezaba a ver cambios y había infidelidades (por parte de su esposo)”. La testigo comentó que se fue un mes a vivir a la residencia de Mirta, un familiar del acusado, y que cuando regresó al domicilio de su progenitora la vio ensangrentada.
“Vi a mi mamá contra la ventana con toda la boca sangrando. Carrazzone decía Está loca. Mi madre no podía mover el brazo.
Ahí fue cuando llamé a la ambulancia. A una de las personas de la ambulancia, (el imputado) lo aparta y le habla. Mi madre me pidió que no dijera nada, y fui a la ambulancia con ella. Dijo que (su marido) se las iba a pagar, que lo iba a denunciar”, detalló.
El nexo entre ambos
No obstante, la querellante explicó que nunca presenció golpes entre la pareja, pero sospecha que él la habría asesinado. Indicó que el acusado iba detrás de la ambulancia y la quería “convencer”. Sin embargo, la testigo aclaró: “Con mi mamá siempre nos peleábamos, ella me pegaba como si fuera una nena y yo se la devolvía. Yo era una adolescente súper rebelde, lo reconozco. Era la típica pelea de mujeres”.
Además, recordó que después de que su madre recibiera el alta, ella y Carrazzone se fueron de la casaquinta de Ezeiza, porque Sequeira los había echado a ambos. “Me voy con mi abuela y mi papá a Liniers, donde vivían. Carrazzone me llevó”, sostuvo la joven. Sin embargo, después de la desaparición de su progenitora, Ponzo dijo que tomó conciencia de que su marido podría tener alguna implicancia.
Con referencia a la pregunta de su abogada, Raquel Hermida Leyenda, la testigo mencionó cómo conoció al acusado: “Lo conozco de Ezeiza, del barrio. Él iba siempre a la estación de servicio donde me juntaba con mis amigos. Sabíamos que era abogado, empezamos a hablar, siempre bien y decía ¿Y tú mamá? Yo soy la que hace la conexión entre Carrazzone y mi mamá. Yo tenía 17 años. Al tiempo, él empieza a hablar con mi madre y se muda a la quinta”.