La seguidilla de robos en Los Hornos colmó la paciencia de los vecinos que marcharon a la comisaría

Desde hace varias semanas, la localidad platense de Los Hornos se convirtió en uno de los focos principales de la ola de inseguridad. Es por ello que, ante la seguidilla de robos tanto en comercios como viviendas particulares, se colmó la paciencia de los vecinos. Estos decidieron realizar una concentración ante las puertas de la comisaría para exigir mayor control policial.

La convocatoria tuvo lugar durante la jornada de ayer en horas del mediodía frente a la seccional Tercera, donde mantuvieron una acalorada reunión con las autoridades. Los frentistas marcharon hasta la dependencia con el objetivo de pedir que aumenten los patrullajes y que se incrementen los uniformados que realizan tareas de prevención.

Alrededor de la una de la tarde, un nutrido grupo de vecinos se hizo presente sobre la avenida 137 entre 62 y 63. “No se puede vivir más así”, fue una de las frases que más repitieron y recordaron la gran cantidad de episodios delictivos que sufrieron en los últimos días, donde varios negocios y casas fueron los blancos elegidos por los malvivientes.

Uno de los hechos se registró a tan solo dos cuadras de la comisaría, lo que enardeció todavía más a las víctimas. Mientras tanto, en las calles 139 entre 61 y 62, una joven fue interceptada por un ladrón en plena vía pública, pero solamente pudo salvarse por el grito desgarrador que puso en fuga al hampón, quien huyó sin cometer el acto.

Sin embargo, en la última semana, fueron varios los negocios de la zona que sufrieron robos, entre los que se encuentra el local de lencería Abril, de 137 entre 63 y 64 (a una cuadra de la seccional policial), la casa de venta de indumentaria Garbo, de 63 entre 137 y 138, y la heladería de 137 entre 64 y 65. Esta repetición de episodios delictivos fue los que empujó a los vecinos a realizar la movilización para exigir mayor seguridad en el barrio.

Berisso: le robaron la bicicleta a un jubilado

Un jubilado de la vecina localidad de Berisso sufrió el robo de la bicicleta con la cual se transporta todos los días y ahora intenta recolectar algunos datos para poder recuperarla.

Todo sucedió mientras el hombre estaba en un kiosco ubicado sobre Montevideo y 17. La víctima había dejado el rodado en la puerta, pero al salir tras realizar una compra, se percató de que desconocidos se lo habían llevado.

Tras ser alertado por un vecino, corrió detrás del ladrón, pero este último se alejó pedaleando a toda velocidad. Ahora intenta recuperar el vehículo robado, que es de marca Raleigh Mojave 2.0 de color verde con letras blancas, rodado 29.