Le quisieron robar el auto con su pequeño bebé adentro

Un estremecedor episodio de inseguridad sufrió un hombre cuando fue abordado por al menos tres delincuentes, quienes lo sorprendieron mientras llegaba a la casa de sus suegros y a punta de pistola lo amenazaron para que les estregara las llaves de su automóvil, sin tener en cuenta que en el interior del coche se encontraba su bebé.

El hecho sucedió a plena luz del día en la localidad de Villa Luzuriaga, del partido bonaerense de La Matanza, en momentos en los que la víctima estaba por ingresar a la propiedad. En ese instante, estacionó el vehículo en la puerta, descendió, y al momento de abrir el baúl aparecieron los malvivientes, que se movilizaban en una camioneta tipo utilitaria de color blanca.

Un hampón bajó rápidamente de la Peugeot Partner empuñando un arma de fuego con la cual encañonó al damnificado, quien al percatarse de la presencia de los ladrones emprendió una fugaz corrida. Sin embargo, a los pocos segundos regresó a donde estaba su automóvil y les terminó pidiendo por favor que lo dejaran rescatar a su hijo de tan solo un año y ocho meses que estaba en el interior.

El hombre había asistido a lo de sus suegros para dejarles el niño a su cuidado, una situación que era habitual en su vida. Pero esta vez la rutina se vio alborotada por la presenciales de los malhechores que, a pesar de que es una zona muy transitada y que era de día, no dudaron un segundo en irrumpir en la escena para arrebatarle su coche marca BMW.

Según detalló la víctima en declaraciones a la prensa, vivió un momento de shock al ver el revólver apuntando hacia él y por la rapidez con la actuaron los sujetos, quienes aprovecharon un segundo de distracción. Además, señaló: “Lo único que pensé es que se lleven todo, y fue lo que les pedí, Por favor dejame sacar a mi hijo del auto, es un bebé”.

Tras rescatar al niño, entró en la casa de sus suegros y mediante las cámaras de seguridad vieron cómo los ladrones cerraron el auto y se quedaron tratando de arrancarlo. Pero como no les respondía, se bajaron y volvieron a subirse a la camioneta en la que habían arribado, dándose a la fuga como si nada hubiera pasado.