Exclusivo
“Les pedimos a todos que el viernes lleven un dibujito y nos acompañen”
Marcos Gómez, el papá de Kim, recibió de forma exclusiva al diario Hoy y pidió que el viernes a las 9 haya un acompañamiento masivo y en paz al Fuero Penal en donde habrá una segunda audiencia con los detenidos.
Compungido, pero contenido. Destrozado internamente, pero seguro de lo que pretende lograr. Marcos Gómez es un padre de roble. Hace una semana le arrebataron una parte de su corazón. De su vida. De lo que Dios le regaló hace siete años y que dos delincuentes juveniles decidieron llevarse hace exactamente una semana.
El crimen de Kim Gómez conmocionó el país el martes de la semana pasada, cuando la nena de siete años salía con su mamá después de realizar una actividad en un club de barrio de 25 y 76 y dos adolescentes decidieron robarles el auto en la esquina de la Avenida 72.
Lo que vino después ya se conoce: una pesadilla que generó que hasta el mismo Presidente de la Nación haga una mención en el discurso de apertura de sesiones el pasado fin de semana. Por primera vez en contacto exclusivo con la Red 92 y el diario Hoy, a siete días de la tragedia, el papá de la nena que mañana tendría que haber empezado las clases con otros compañeritos en el Instituto Pedagógico de barrio El Carmen pidió acompañamiento y serenidad.
“Queremos que vayan a la marcha que convocamos para el viernes a las 9 de la mañana en la Fuero Penal en donde estuvimos el otro día. Ahí habrá otra audiencia y nos gustarían que todos los que nos puedan acompañar lo hagan con un dibujito o que lleven algo distintivo como le gustaba a Kim”, explicó el hombre de 34 años que tiene un negocio de construcción de piletas de natación que no abre hace una semana y sabe que tiene que seguir adelante como cualquier persona trabajadora de este país.
“Flor (por la mamá de Kim) está acompañada por la familia de ella. Vamos a estar todos juntos el viernes y pedimos que la gente se comporte”, recalcó el padre de la nena cuyo nombre está presente entre todos los argentinos por la brutalidad con la que se dieron los hechos. “Ayer fui otra vez caminando a 25 y 72 y se me acercó una mamá llorando con mi hijo que hace básquet en el mismo club. Me contó que tiene una nena de cuatro años que no quiere subir más al auto por todo lo que pasó”, relató. “Lo único que les voy a asegurar es que para encontrar algo de paz en todo lo que estamos pasando, es poder hacer algo por todo lo que pasó. Yo mucho no entiendo de leyes. Pero por lo que viví ahí adentro en la audiencia, estoy seguro que se van a hacer las cosas bien”, comentó.
“Florencia está partida al medio y mucho no la quiero molestar. Está con la familia. Yo soy una persona auténtica y cuando tenga enfrente a alguna de las autoridades me nacerá decirles lo que sienta en ese momento”, concluyó en relación a las responsabilidades por todo lo que pasó hace una semana en Altos de San Lorenzo.