Mataron a su hermano, secuestró a un testigo y lo amenazó para que le dé información

Luego del brutal crimen cometido a un albañil en la localidad de Altos de San Lorenzo, el cual fue asesinado a golpes en la zona de 18 y 83 y por el cual fueron detenidos dos sujetos, en la jornada de ayer se dio un hecho de justicia por mano propia cuando el hermano de la víctima quiso obtener información sobre el homicidio.

Según indicaron voceros oficiales a Trama Urbana, el pariente del fallecido se ensañó con un vecino, el cual habría sido testigo del asesinato. Debido a esto, el hombre fue a buscarlo y, delante de su pareja, lo amenazó con un arma de fuego y lo llevó por la fuerza hasta su domicilio. “Lo arrastró 200 metros con un revólver en el cuello”, dijo una fuente a diario Hoy.

“El sospechoso tenía retenido contra su voluntad a otro masculino, con la intención de sacarle información sobre el homicidio de su hermano ocurrido días antes en un ajuste de cuentas”, aseveró el vocero, quien agregó: “El ahora detenido es un conocido delincuente del barrio, que tenía la zona en jaque por las amenazas y robos que cometía”.

Tras realizar dos allanamientos, los agentes de la DDI La Plata lograron capturar al individuo, además de incautar tres celulares en uno de los inmuebles. Debido a esto quedó imputado por “coacción agravada” y se mantuvo comunicación con la UFI nº 2

Cabe mencionar que por el crimen hay dos detenidos y un tercer implicado sigue prófugo, siendo este el motivo por el cual el hermano del sujeto asesinado fue a buscar información.

Un homicidio atroz

Durante la noche del domingo un albañil, identificado como Raúl Orlando Torales, fue asesinado a golpes y cuchillazos en Altos de San Lorenzo. La víctima, de 33 años, fue hallada tirada en 16 y 83 y pronto un llamado al 911 alertó sobre lo sucedido.

Minutos más tarde se apersonaron al lugar patrulleros y una ambulancia, cuyos profesionales médicos cercioraron el deceso del infortunado. Si bien un vocero oficial indicó que tenía al menos “un puntazo”, testigos señalaron que tenía el rostro desfigurado, con vidrios incrustados en la cara, lesiones en la cabeza y otros cortes en el cuerpo.

Según fuentes, se supo que “la autopsia indicó que el hombre se ahogó en su propia sangre. Los golpes y cortes que tenía en el rostro le provocaron un sangrado interno, con el que se asfixió”. Por último, un portavoz admitió que “estaba muy golpeado”, y agregó que “al parecer lo molieron a trompadas y lo cortaron también con botellas”.