Robaron y causaron destrozos en un comercio céntrico

Actuó una banda de cacos que, tras el episodio, se dio a la fuga antes de la llegada de la Policía. Indignación en el lugar

En una modalidad delictiva que crece cada semana y parece no parar, nuevamente sujetos desconocidos cometieron un robo y destrozos durante la madrugada de ayer en un local ubicado en pleno centro, del que escaparon con dinero en efectivo, mercadería y otros elementos de valor, reportaron ante este medio fuentes policiales y judiciales. 

En esta oportunidad, la víctima fue un comercio de indumentaria femenina, emplazado en calle 55 entre 10 y 11, hasta donde llegaron los delincuentes pasadas la 1.30.

Sin importarles las cámaras de seguridad de la zona ni los posibles testigos del hecho, rompieron el vidrio lateral de la puerta con un elemento contundente y entraron al local rápidamente. 

Al activarse la alarma, tuvieron que actuar con más velocidad, por lo que iniciaron una frenética búsqueda por el interior, con el fin de adueñarse de diferentes elementos que consideraran de valor. 

Así, se apropiaron de una gran cantidad de prendas para mujeres y del dinero que había quedado en la caja registradora, entre otros elementos. Acuciados por la alarma, decidieron escapar y perderse de vista. 

Anoticiados por un llamado al servicio de emergencias 911, un móvil del Comando de Patrullas La Plata, al mando del comisario Ricardo Astopini, llegó al sitio y, al corroborar el suceso, le dio intervención a sus pares de la comisaría Primera, con jurisdicción en la zona. 

Fueron ellos quienes, por orden de la Fiscalía Penal en turno, comenzaron a buscar cámaras de seguridad para establecer cómo se había producido el ilícito y, sobre todo, para poder dar con los causantes. 

Si bien por lo bajo las autoridades apuntan que podría tratarse de una banda de menores sin techo, no tienen las herramientas suficientes para poder corroborarlo. De hecho, no hay hasta el momento ninguna evidencia. 

Cansados de la inseguridad, los vecinos y los comerciantes de la zona se mostraron visiblemente molestos y aseguran que ya no pueden trabajar con tranquilidad. “Pasa esto de día, de noche y de madrugada. Ya no sabemos qué hacer”, fue la queja de uno de ellos. 

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