Usando ropa de agentes penitenciarios, aterrorizaron a una familia de Olmos

La zona oeste de La Plata volvió a ser escenario de un hecho de delincuencia: ahora, las víctimas fueron seis integrantes de una familia domiciliada en la zona de 44 y 208, en el límite entre las localidades de Lisandro Olmos y Ángel Etcheverry. Los delincuentes, ambos armados, llevaban ropa de agentes penitenciarios.

Todo comenzó durante la mañana de ayer, cuando los damnificados, dos de los cuales son personas mayores de 80 años, se encontraban tranquilamente dentro de su hogar. En ese momento un par de individuos forzó la entrada de la propiedad, la cual se encuentra subdividida, y ganó el interior.

En un primer momento la familia no entendía qué sucedía, ya que ambos malhechores llevaban puestos uniformes del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB), pero la confusión se terminó abruptamente cuando los individuos dejaron claras sus intenciones. Armados con pistolas, amenazaron a los allí presentes y los llevaron hasta otra parte del inmueble.

Una vez allí, mientras uno les apuntaba el otro los maniataba con sogas de embalaje y, con la situación ya bajo control, comenzaron a recorrer cada rincón del hogar.

Tras varios minutos de tensión, se apoderaron de un iPad, una tablet, cuatro teléfonos celulares y la suma de $50.000.
Con el botín en su poder, los ladrones cargaron todos los elementos en el Peugeot 208 gris de la familia (patente AD034RH) y escaparon a toda velocidad, perdiéndose de vista. Una vez distanciados de sus captores, las víctimas lograron liberarse y dieron aviso de inmediato a la Policía.

La investigación

En el hecho tomó intervención la comisaría Decimoquinta, la cual cuenta con jurisdicción en la zona. Según detallaron fuentes “los asaltantes usaron guantes en todo momento para cubrir sus huellas”. Debido a esto, se están analizando las cámaras de seguridad de las inmediaciones, públicas y privadas, para poder dar con pistas que revelen el paradero o identidad de los autores del hecho, que hasta el momento se mantenían prófugos.

Cabe mencionar que ninguno de los integrantes de la familia resultó con lesiones de gravedad, más allá del mal momento vivido.

El episodio fue caratulado como “robo agravado” y se mantuvo comunicación con la UFI Nº 9, de Autores Ignorados, e intervino el Gabinete de Asistencia a la Víctima.