Cálido reconocimiento a profesora de Matemáticas

Varias generaciones de exalumnos de la Facultad de Ingeniería de la UNLP propiciaron que María Inés Baragatti imparta una última clase. Será la excusa para evocar sus cuatro décadas al frente del aula

Durante muchos años, las Matemáticas fueron consideradas uno de los “cucos” en la siempre ardua senda del conocimiento. Los números, las fórmulas y las ecuaciones se presentan, para muchos, como un escollo en cualquier instancia educativa, y los profesores encargados de enseñarlas son tildados de incomprensibles. 

Sin embargo, siempre hubo hombres y mujeres que transformaron esos presuntos jeroglíficos en juegos y saberes accesibles para el alumno medio. María Inés Baragatti fue uno de ellos. Durante cuarenta años enseñó la materia con tanta pasión que logró que varias generaciones de estudiantes disfrutaran de sus clases y aprendieran con alegría los secretos de una de las ciencias duras.

Esa entrega y ese compromiso serán reconocidos. Mañana, martes 16 de mayo, a las 14, en el aula E-35 del 2º piso del Departamento de Elec­trotecnia de la Facultad de Ingeniería de la UNLP, tendrá su merecido homenaje a través de exalumnos de todas las épocas.

Baragatti fue profesora de Matemáticas durante cuatro décadas. Unos años después de jubilarse, un grupo de alumnos decidió hacer justicia con aquellos años en que legó su sabiduría y su pasión. Baragatti aceptó el convite gustosa, y hasta despuntará el vicio con una clase especial sobre “Fundamentos de números complejos”. 

“La idea es registrar su arte, su magia, porque dando clases es brillante”, expresó el estudiante de Ingeniería Electrónica Damián Pedraza, impulsor de la iniciativa y mentor de “Docentes Apasionados”, un grupo de alumnos de la Facultad que se ocupa de homenajear y distinguir con eventos públicos a los docentes que realizan su trabajo con pasión, vocación, amor y compromiso. 

El encuentro, que cuenta con el apoyo del Departamento de Electrotecnia, estará cruzado por una gran nostalgia. Los admiradores de la profesora, quien también fue docente en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ), armaron un gran foro en el que vuelcan las anécdotas a través de la página de Facebook “Yo cursé con Baragatti”. 

“Nos daba todo. Dejaba el alma en el aula. Por eso no podemos permitir que pase desapercibida. Si logramos que un chiquito o chiquita vea en algún momento el video que vamos a hacer de su clase y el día de mañana decide dedicarse a la docencia, entonces estamos cambiando la sociedad”, concluyó, esperanzado, Damián.