Fuerte viento y lluvia en la región

Árboles y postes caídos, anegamientos y un incendio: el saldo de la tormenta

El día después del viento y la lluvia evidenció que el temporal fue breve pero intenso: los troncos desmoronados cortaron calles, los postes generaron problemas con la luz y los bomberos de El Peligro debieron sofocar un pequeño foco ígneo 

La ciudad amaneció con los rastros evidentes de la tormenta que azotó, el sábado por la noche y en las primeras horas de la madrugada del domingo, por momentos torrencialmente, la ciudad de La Plata. Aunque el aguacero fue de a ratos intenso y hubo ráfagas fuertes de viento, el temporal no fue prolongado y las calles anegadas desagotaron rápidamente. Las huellas más visibles fueron varios árboles caídos, algunos de ellos desmoronados, que cortaron calles y voltearon postes de luz.

La zona de Los Hornos fue una de las más castigadas. En la calle 150 y 68, el tronco de un árbol quedó partido por la mitad por la caída de un rayo. Ariel, un vecino de la cuadra, en diálogo con este diario, contó cómo fue el episodio que tuvo lugar el sábado por la noche. “Alrededor de las 10 nos sorprendió una tremenda luz en medio de la tormenta. Luego escuchamos un estruendo muy fuerte y vimos que el rayo había caído frente a nuestra casa”, relató el frentista. 

No fue el único árbol arrasado, según informó la Dirección de Defensa Civil. “En 68 entre 152 y 153, un ejemplar dañó el tendido eléctrico, y en la esquina de 68 y 156 cayó un árbol atravesándose en toda la calle. Otra caída que cortó íntegramente la calzada se 

produjo en 14 y 523, y otra en 157 entre 67 y 68”, puntualizó el organismo. Por fortuna, en ninguno de los incidentes hubo peatones ni automovilistas circulando por el lugar, por lo que no se registraron heridos. 

También hubo postes caídos en 168 y 521, y momentos antes de la tormenta, en El Peligro, en 229 y 429, un poste se prendió fuego y los cables cayeron sobre una casa. Allí trabajaron bomberos de la localidad, a cargo del cabo Leonardo Compagnucci. 

Aunque no se registraron inundaciones de magnitud, hubo calles anegadas en la parte antigua de Tolosa (117 y 528), el casco urbano (12 y 45), y 143 entre 526 y 527. Los arroyos no sufieron desbordes y sus cauces drenaron normalmente, según explicaron autoridades comunales.

Se derrumbó un tapial 

Uno de los episodios más relevantes que dejó la tormenta de ayer a la madrugada fue el desmoronamiento de un tapial desde tres metros de altura en la calle 31, entre 73 y 74, frente al Cementerio Municipal. La caída de la pared fue una advertencia con suerte: “Justo no estábamos por esas casualidades del destino, pero el edificio no tiene ninguna mantención ni cuidado”, dijo a este diario uno de los vecinos que tiene su casa lindante a la construcción.

Se trata de un edificio abandonado de tres pisos ubicado sobre una bicicletería, que quedó hace mucho tiempo sin finalizar. Por la falta de mantenimiento, sus cimientos parecen pender de un hilo. “La preocupación no termina en la pared. Todo el edificio es viejo, está desocupado y no hay ningún responsable”, agregó el vecino, quien pidió que se tomen cartas en el asunto. “Habría que derribarlo por completo con todas las precauciones del caso, porque la construcción continúa para atrás y para los costados”, explicó. 

Al parecer, la tormenta precipitó un final ya anunciado para la vieja estructura. “Es un peligro no solo para los que vivimos alrededor, sino para todos los que pasan por ahí”, concluyó. 

Noticias Relacionadas