Macri: “bajar la inflación llevará 2 o 3 años”

El presidente reconoció que no habrá soluciones inmediatas ante el incremento del costo de vida. Apuntó contra sectores formadores de precios

Uno de los temas que cala hondo en los argentinos, es el de las distintas sacudidas que ha tenido la inflación a lo largo de la historia, que ha convertido a este índice en algo fundamental para la vida diaria de los ciudadanos, que sufren cada punto de más que se tiene en el mismo. 

Consciente de esta realidad, en el día de ayer el presidente Mauricio Macri afirmó que “mi gobierno está comprometido a reducir la inflación”, y se mostró confiado con la posibilidad cierta de que su gobierno pueda reducir la misma llevándola a un dígito hacia el fin de su mandato.

En un acto organizado en la ciudad de Tres de Febrero, el mandatario nacional sentenció que “bajar la inflación llevará dos o tres años”, diferenciándose así de la intransigencia kirchnerista, que no mencionaba a la inflación en sus discursos para no darle entidad al reclamo de la sociedad. 

“Cuando era jefe de Gobierno de la Ciudad alerté de algo muy grave que estaba pasando en la Argentina, que nos iba a hacer mucho daño, porque un gobierno que se administra mal, lo peor que hace es abusar de la inflación, que es el peor impuesto que se le puede cobrar a la gente“, planteó Macri.

A la vez que agregó que “el gobierno kirchnerista fue el que más impuestos cobró en la historia de la Argentina, y nos volvió a llevar a la inflación en una de las más alta del mundo. Nuestro gobierno está comprometido a reducir la inflación, en un camino de dos a tres años, como los demás países de Latinoamérica y del mundo”.

Los precios y su aumento sostenido en las últimas semanas, principalmente en los alimentos de la canasta básica, ha llevado a que los formadores de precios estén en el centro de la discusión política por la indiscriminada remarcación en las góndolas de los comercios.

El Jefe de Estado expresó que desde su gobierno “le hemos pedido a todos los supermercadistas que publiquen en Internet todos los precios de los artículos que ellos venden, para que cualquier argentino pueda chequear donde se encuentra el mejor precio y así defender su salario".

De esta manera Macri busca mostrarse comprometido con dar solución a uno de los temas centrales para los argentinos, que ven como sus magros salarios se ven evaporados por una inflación creciente que no hace más que licuar cualquier clase de progreso personal y familiar.

Vuelve el IPC-Congreso

En medio de la tensión por el control de precios, el diputado del Frente Renovador (FR), Marco Lavagna, aseguró que “casi seguro a principio de la semana próxima” se dará a conocer en la Cámara baja la inflación alternativa de noviembre y diciembre de 2015 y enero de este año, elaborada en base a una combinación de relevamientos e informes privados.

Lavagna señaló que la idea del Frente Renovador “es seguir con el índice hasta tanto haya estadísticas confiables” oficiales, ya que el INDEC calculó que recién en setiembre volverá a difundir el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El economista precisó que la idea es “relanzar y continuar con la serie” del llamado “IPC-Congreso”, como se conocía al promedio de inflación que mensualmente durante los últimos años informaban legisladores opositores al kirchnerismo encabezados por la entonces diputada Patricia Bullrich y el bloque del PRO.

EL FUTURO DE LA ECONOMÍA SEGÚN LOS ESPECIALISTAS

“La inflación no se puede frenar abruptamente”

Por Jorge Colina (*)

Especial para Hoy

La inflación no se puede frenar abruptamente y sus consecuencias se extienden en el tiempo. Por eso, no se debería haber caído nunca en una inflación tan alta porque luego erradicarla resulta muy complicado. Requiere que la salida sea gradual, con la reducción del Gasto Público, entre los principales temas a tratar. De hecho, el gobierno se ha planteado una meta de inflación decreciente donde recién dentro de 3 o 4 años se llegaría a índices de un dígito.

Cuánto será la inflación en 2016 es prematuro decirlo. Enero y febrero han sido de aumentos importantes por el impacto del sinceramiento del tipo de cambio oficial. Habrá que seguir de cerca las Paritarias y la evolución del gasto público.

Que el tipo de cambio esté cerca de $15 es precisamente porque se está en un proceso inflacionario donde el dólar es un precio más que debe evolucionar en función del resto de los precios para no retrasarse.

(*) Economista. Jefe de Investigaciones del Instituto para el Desarrollo Social Argentino (IDESA)

“El dólar se va a mantener entre $14 y $16”

Por Federico González Rouco (*)

Especial para Hoy

Para analizar la inflación hay que recurrir a la honestidad y comparar lo ocurrido durante la gestión de Axel Kicillof, donde en 2014 pasamos de un 25% a un 40% de inflación. Hoy hablamos de poco más del 30%, cifra que, a fin de año, tenderá a bajar al 25% o 30%.

Hay que notar que el gobierno ya está tomando medidas, que la cantidad de dinero en la economía está creciendo muy por debajo de lo que lo hacía durante el kirchnerismo. Pasamos de un 40% de expansión monetaria en diciembre, a 30% en enero y febrero. Esto, indefectiblemente, se va a traducir en una desaceleración de la inflación.

El dólar está llegando a valores que todo el mundo esperaba. No va a estar ni a $13 ni a $20, sino en el orden de los $15.

Pero que la divisa continúe subiendo o no va a depender de cuánto tardemos en acordar con los holdouts, lo que puede implicar un financiamiento en inversiones productivas, reactivando la economía.

(*) Analista económico de la Fundación Libertad y Progreso

 “La recesión no puede ser la salida a la inflación”

Por Claudio Lozano (*)

Especial para Hoy

Era obvio que íbamos a asistir a un aumento de precios como la ocurrida antes, durante y después de la devaluación.

Sobre esta situación, ahora se carga el aumento de tarifas, que garantiza fuertes impactos inflacionarios para los meses de febrero y marzo. Hay dos cosas que el gobierno tendría que hacer: llamar a un acuerdo social, sobre la base de un descenso de los precios con recomposición del poder adquisitivo; y generar mesas de concertación por cadena de producción donde, con participación de trabajadores, Estado y empresarios, se ponga un límite a todos los abusos de posición dominante vigentes en los mercados argentinos.

Además, hay que cambiar el enfoque, porque el gobierno pretende bajar la inflación descendiendo la actividad económica, deteriorando la demanda, lo que induce a un proceso recesivo. Esta es la meta del presidente: desacelerar la evolución de los precios vía recesión en el segundo semestre del año, y esta no una manera virtuosa de resolver el problema inflacionario.

(*) Economista. Exdiputado nacional

“Todo se juega en el primer semestre del año”

Por Aldo Pignanelli (*)

Especial para Hoy

El problema de la inflación se explica por tres motivos: déficit fiscal, donde el gobierno ha decidido no aplicar una política de shock sino un gradualismo; falta de flujo de dólares y de inversión para aumentar la oferta; y el comportamiento monopólico de algunas empresas que aprovechan los desequilibrios macroeconómicos para sacar ventaja.

Hay que buscar los equilibrios que tuvo Argentina por el 2002, con superávit fiscal y en la balanza comercial, dólar competitivo y una política monetaria estable. Esas variables hoy están lejos de alcanzarse.

La batalla de todas las batallas es el déficit fiscal. Si se logra bajar, se le ganará a la inflación y al dólar. Por ahora, la inflación está en alza, alrededor del 4% mensual, cifra que seguirá en alza tras el aumento de tarifas.

Todo se juega en el primer semestre del año, lo que ocurra allí será vital para lo que venga después. El gobierno trata de inducir a todos a que en el segundo semestre bajará la inflación. Pero por ahora no lo está logrando.

(*) Expresidente del Banco Central de la República Argentina

“Los controles de precios no tienen grandes resultados”

Por Manuel Solanet (*)

Especial para Hoy

El crecimiento inflacionario es producto de la recomposición de precios relativos a raíz de la modificación en las tarifas de servicios públicos y en productos que estaban en Precios Cuidados y ya no lo están. No obstante, los controles de precios nunca tienen grandes resultados; la economía debe sincerarse y no basarse en números artificiales.

Pero estos efectos son por una única vez y no necesariamente se van a mantener. La inflación del primer trimestre se va a atenuar y va a ser menor en el segundo semestre del año. Para entonces, esperemos que el gobierno ya haya transparentado las estadísticas del INDEC que durante tantos años el kirchnerismo “dibujó”.

En tanto, el tipo de cambio alcanzó un nivel de equilibrio que, en general, ya había sido anticipado por comerciantes y productores. En la medida en que la confianza en el gobierno crezca, el flujo de inversiones externas y las exportaciones van a mejorar la oferta interna de dólares y es probable que la divisa no pueda salirse de su cauce.

(*) Ex Secretario de Hacienda de la Nación

“Cuando aumentan las tarifas, sube el valor de los productos”

Por Roberto Dvoskin (*)

Especial para Hoy

La inflación no se puede controlar porque las causas de la inflación fueron generadas por las propias políticas de este gobierno. Si yo devalúo un 40% y al mismo tiempo bajo las retenciones, aumento los precios de exportación de los alimentos por lo tanto en el mercado interno tienen que aumentar, no hay ninguna parte de la política económica que sea contenedora de precios.

Cuando aumentan las tarifas públicas, suben el valor de los productos en general, complicando aún más el panorama. Cada gobierno cree que a partir de ciertas políticas públicas esto va ser a mediano y largo plazo mejor para la población, la economía va a crecer y va a haber más para repartir.

La política del gobierno nacional a corto plazo genera una transferencia de recursos de los sectores de menor poder adquisitivo a los de mayor poder adquisitivo, a los sectores exportadores, a los sectores industriales exportadores.

(*) Profesor de la Universidad de San Andrés. Ex Secretario de Comercio Interior

 “Al gobierno le toca resolver problemas que el kirchnerismo eludió”

Por Juan Dumas (*)

Especial para Hoy

Hay una razón fundamental por la que existe la inflación y es que venimos con una inercia anterior, generada por un descontrol monetario, que nos ha hecho llegar a tener un déficit del 8% del PBI. Arreglar esto de un día para el otro requiere de un shock económico que no es aconsejable.

Va a llevar tiempo reordenar las finanzas públicas y en la medida en que se vayan resolviendo, el ritmo inflacionario va a bajar. Controlar los precios, tal como pretende el presidente Mauricio Macri, podrá surtir efectos durante un brevísimo tiempo, pero generalmente no funciona. Más bien, sucede lo contrario: medidas como estos a veces llevan a la gente a cubrirse y subir los precios antes de que se aplique el control; por otro lado, podrían generar desabastecimiento en el producto que se intenta controlar.

Lo importante, al discutir todo esto, es que al nuevo gobierno le toca pagar los costos políticos que el kirchnerismo eludió, pateando los problemas para adelante y sin intentar soluciones.

(*) Exsecretario de Comercio Interior de la Nación