Boca y Tigre viven la dulce espera de la finalísima

Se viene la gran final de la Copa de la Liga Profesional de Fútbol, donde Boca Juniors y el Club Atlético Tigre se van a ver las caras en 90 minutos, o alargue y penales, que van a determinar quién será el nuevo campeón del certamen argentino, que es más que apasionante. El duelo comenzará a las 16, tendrá el arbitraje de Darío Herrera y se podrá disfrutar por los canales del pack fútbol.

En cuanto a los equipos que van a saltar al campo el domingo en el estadio Mario Alberto Kempes, en el Xeneize tanto Marcos Rojo como Sebastián Villa volverán a ser de la partida. Ambos no fueron parte del choque con Corinthians del martes pasado, empate 1-1, en la Copa Libertadores de América por estar suspendidos, y ahora serán utilizados por Sebastián Battaglia.

Los 11 que piensa el entrenador para enfrentar al Matador son: Agustín Rossi; Luis Advíncula, Carlos Zambrano, Marcos Rojo, Frank Fabra; Pol Fernández, Alan Varela, Juan Ramírez; Óscar Romero, Darío Benedetto y Sebastián Villa.

¿Cómo llegan los de Victoria?

Luego de la gran victoria por penales contra Argentinos Juniors en cancha de Huracán, el plantel principal de Tigre tuvo mucha tranquilidad y un ánimo muy arriba para empezar a planificar la final ante Boca.

Sin bajas debido a que no hay ninguna lesión, al tiempo que tampoco ningún futbolista fue sancionado con cinco amarillas o una expulsión, el director técnico del primer equipo, Diego Martínez, repetirá los 11 que le ganaron a los de Gabriel Milito y buscará hacer historia en el Kempes de Córdoba.

Gonzalo Marinelli; Lucas Blondel, Víctor Cabrera, Abel Luciatti, Sebastián Prieto; Sebastián Prediger, Ezequiel Fernández; Facundo Colidio, Cristian Zabala, Alexis Castro; Mateo Retegui, de no mediar ningún inconveniente serán los 11 que tratarán de quedarse con el trofeo liguero.

Las entradas, una complicación

Hubo mucho malestar en Tigre debido a la decisión de la organización de darle el 70% de las entradas a Boca, ya que entienden que un gran número de fanáticos del Matador podía viajar a Córdoba.