Estudiantes volvió al trabajo en City Bell
Tras el empate en Brasil por la Copa y la jornada del miércoles libre, el plantel profesional retomó ayer los entrenamientos de cara al partido del próximo domingo ante Vélez.
Las realidades de Boca y River sufrieron modificaciones en los últimos tiempos y ambos llegan al partido de manera diferente a lo que era unas semanas atrás.
05/05/2023 - 00:00hs
La histórica canción de Mercedes Sosa dice que “cambia, todo cambia”. A esta premisa pueden adaptarse tanto Boca como River, que se enfrentarán este fin de semana y en un contexto muy diferente al de hace poco más de 20 días. Un Superclásico que paralizará al país este domingo, y que tiene bastantes datos interesantes en la previa. A continuación, desde diario Hoy te contamos todos los detalles al respecto.
En realidad, el novedoso y hasta en algún punto sorprendente panorama no solo queda atado al Millonario y el empate sufrido ante Atlético Tucumán o el 5-1 ante Fluminense en Brasil, sino que en el Xeneize las cosas también fueron cambiando a diferencia de unas semanas atrás, cuando solo reinaba el desconcierto.
¿Cómo llega cada uno?
En cuanto al equipo de Jorge Almirón, parece empezar a encontrar la mano del entrenador que asumió hace muy poco y llega envalentonado, porque ha demostrado consolidar la idea futbolística del ex-DT de Lanús. Como si esto fuera poco, ya lleva un total de tres triunfos de manera consecutiva y solo tendría una duda en el 11 inicial. Esto se debe a la expulsión de Martín Payero ante Racing que lo obliga al técnico a realizar un cambio y con esto, a priori, son tres los futbolistas que corren con más fuerza por estas horas: Cristian Medina, Equi Fernández y Óscar Romero. Los mediocampistas, cada uno con características bien distintas (incluso también del propio Payero), se disputan el lugar del ex-Banfield para el duelo de este domingo.
Almirón cuenta con diferentes alternativas y con el correr de la semana seguramente terminará de tomar una decisión con relación al reemplazante de Payero, pero lo cierto es que ya dio lo que podría tomarse como un indicio, o al menos una prueba que le funcionó. Esto se debe a que, cuando salió el jugador de 24 años, quien ingresó fue Medina. Si bien no da seguridad de cara al duelo con River, ya que es otro escenario, rival y contexto, puede tomarse como una señal, pero todavía no hay nada concreto ya que faltan dos prácticas.
Por su parte, y respecto al elenco de Martín Demichelis, viene de sufrir una dura derrota ante Fluminense por 5 a 1 en la Copa Libertadores como visitante y quiere afianzarse en la cima del campeonato tras sufrir un traspié en Tucumán. De todos modos, lleva cuatro encuentros sin recibir goles como local y su presente en la Liga Profesional es muy positivo, ya que hasta el momento tiene seis unidades más que su escolta.
Así las cosas, desde lo positivo, el mediocampista Enzo Pérez y Enzo Díaz cumplieron su fecha de suspensión ante Atlético Tucumán y podrán jugar contra Boca. Sin embargo, el volante José Paradela fue expulsado frente al Decano y no podrá estar en el estadio Monumental. A su vez, la duda del exdefensor que comanda al conjunto de Núñez sería la inclusión de Paulo Díaz. El chileno está mucho mejor de la distensión muscular en el bíceps femoral izquierdo que sufrió el 23 de abril contra Independiente, pero por ahora sigue en duda. De lo que no hay dudas es que será un duelo a todo nada y será aparte, como se dice en el mundo del fútbol.