La primavera floreció para River en la Bombonera
El Millonario superó 1-0 a Boca en una nueva edición del Superclásico del fútbol argentino en el marco de la fecha 15 de la Liga Profesional. Con el gol de Manuel Lanzini, el elenco dirigido por Marcelo Gallardo dejó al de Diego Martínez en la cuerda floja.
En el día de la primavera y la vuelta de Marcelo Gallardo a la Bombonera, el que terminó festejando fue River. Con gol de Manuel Lanzini, el primero desde que se cruzó nuevamente la banda roja, le ganó 1-0 a Boca el Superclásico y se quedó con mucho más que tres puntos en la Liga Profesional. Al Xeneize le anularon el empate sobre la hora por una mano de Milton Giménez.
Más allá del empuje en el arranque del Xeneize, que logró la amonestación de Federico Gattoni a los diez segundos e insinuó con un tiro libre que cruzó toda el área grande y salió por el fondo, fue un primer tiempo para el olvido y quedó reflejado en la pasividad de Diego Martínez en el corralito local.
Un encuentro sin demasiadas ocasiones hasta que el Millo encontró la llave del gol por el carril central. A los 19, Manuel Lanzini le ganó la espalda a Ignacio Miramón en el círculo central, condujo a toda velocidad y abrió hacia la izquierda para Facundo Colidio, quien se sacó de encima a Cristian Lema y definió de zurda.
Su disparo explotó en el pecho de Sergio Chiquito Romero y, en el rebote, el número 10 riverplatense se terminó frotando las manos.
Para el complemento, Boca movió el banco y rápidamente exhibió otra cara: Miramón, de deslucido rendimiento, le dejó su lugar a Exequiel Zeballos. Y el Changuito, fiel a su estilo, empezó a encarar y revitalizó a sus compañeros. Antes del cuarto de hora casi marca la igualdad, pero Franco Armani salió a cortar justo y Kevin Zenón no pudo capitalizar el rebote.
Con más empuje que ideas, Boca adelantó sus líneas y buscó el empate a toda costa. Estuvo cerca con un zurdazo de Luis Advíncula que reventó el travesaño y también con otra aparición de Zeballos en zona de peligro. El fondo de River, de todos modos, se mostró bien plantado (incluso aún más con el ingreso de Germán Pezzella). Aunque tuvo que sufrir y cruzar los dedos en la última jugada del Superclásico.
Ya sobre la hora, Milton Giménez, quien había saltado a la cancha con Edinson Cavani, se llevó puesto un centro envenenado al área chica y firmó el 1-1 agónico. Sin embargo, el VAR llamó al árbitro Nicolás Ramírez y le pidió revisar la jugada. Después de poner la lupa en esa acción puntual, se notó que el ex-Banfield había rozado la pelota con la mano y finalmente el gol fue anulado. Tras eso, no hubo tiempo para más y River se quedó con un triunfo clave en la previa al duelo del próximo martes por la vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores ante Colo Colo. Por el otro lado, Diego Martínez quedó en la cuerda floja, pese a declarar que “tengo fuerzas para seguir”. En las últimas horas hubo reuniones del Consejo de Fútbol y su salida del Xeneize es inminente.