Se bajó el telón del mercado de pases y Estudiantes se tendrá que arreglar con lo que tiene
A pesar del pedido de Eduardo Domínguez, no llegarán nuevos refuerzos.
Se bajó el martillo. Después de varias idas y vueltas con la fecha de cierre del mercado de pases, ayer finalmente culminó el período para incorporar o vender futbolistas en el fútbol argentino, y de esta manera no llegarán más refuerzos a Estudiantes, a pesar del pedido de Eduardo Domínguez, y la búsqueda de la dirigencia de contratar un delantero más. Un plantel reducido que en los últimos partidos no pudo completar banco de suplentes con profesionales, pero que únicamente tiene por delante una competencia: la Liga Profesional. Habida cuenta que el Pincha quedó eliminado en fase de grupos de la Copa Libertadores y lo propio en 16avos de final de la Copa Argentina, no hubo esfuerzo económico a la hora de reforzar el equipo del Barba Domínguez. El primero en llegar fue el central Facundo Rodríguez, y luego lo siguieron el delantero Luciano Giménez y el mediocampista Gabriel Neves. Los mencionados, llegaron para ocupar los lugares que dejaron vacantes con sus partidas, Zaid Romero, Javier Correa y Fernando Zuqui.
Luego fue el turno de más defensores, como el lateral izquierdo Santiago Arzamendia, para pelear el puesto con Benedetti, sumado a la chance de que el Vasco sea vendido a la posibilidad al Genoa de Italia que finalmente quedó trunca. Y por último, Sebastián Boselli, que se suma como una variante más de una defensa que necesita ganar solidez y que de a poco, buscará ganarse su lugar en la zona central aunque también lo puede hacer como lateral derecho. De esta manera, y pese a que en las últimas conferencias de prensa el entrenador reconoció que la intención de él y del Club era reforzar el ataque del equipo, la dirigencia no pudo concretar ningún arribo más. En cuanto a lo deportivo, el plantel albirrojo quedó licenciado hasta el próximo lunes.