Próxima a rodar una película junto a Nicolás Furtado, la reconocida actriz española encabeza el elenco de Express, junto al argentino Esteban Meloni.
Maggie Civantos es la protagonista de Express, primera serie española de Starzplay, que desde hoy se puede ver en la plataforma. En ella encarna a la líder de un grupo de élite de negociadores, quien deberá resolver casos de secuestros express justamente luego de haber sido ella misma una de las víctimas de esta modalidad de delito. Diario Hoy dialogó con la actriz en México y trajó las mejores respuestas del encuentro.
—La serie marca primeras veces en muchos sentidos para varios de los intérpretes. En tu caso, por ejemplo, ¿es la primera vez que hacés de madre?
—No, de madre ya he hecho mucho (risas), pero sí de madre de una niña tan mayor, que eso me preocupaba.
—Y muy rebelde…
—Y muy rebelde, pero la actriz es maravillosa y me lo puso muy fácil. Y de hecho creo que es lo que más me preocupaba porque no quería entrar en el cliché de hacer o tener que ponerme en un personaje superserio para que sea creíble. Porque claro, realmente no nos llevamos tanto tiempo, es una madre joven. Entonces lo jugamos a favor, lo jugamos a que Bárbara se pone la ropa de su hija porque en el fondo tiene esta cosa de no querer madurar y de decirle “tía, no sé qué”, esta cosa de querer acercarse a su hija, y que lo hace de una forma muy torpe. Pero es muy cómico ver cómo no da una con ella. Entonces, a mí esto es de lo que más me preocupaba. Porque yo ya había hecho acción, sabía que podía manejar eso; ya había hecho thriller, e incluso había trabajado anteriormente como policía, como detective, en otra serie. Entonces era la primera vez que tocaba un terreno que, aunque había hecho de madre varias veces, siempre era de niños o niñas muy pequeños y demás. Y este era el terreno, bueno, de una madre de una adolescente, con conflictos de adolescente; y fue super fácil gracias a la química que tuve con Alba Planes, la actriz que interpreta a Gus.
—¿Qué fue lo primero que se te cruzó por la cabeza al leer el guión y tu personaje? Porque cuando uno ve la serie es tan inclasificable que no sabe hacia dónde va la historia…
—Para mí fue increíble, me impresionó mucho lo maravillosos y perfectos que son todos los personajes. A todos, los quieres; y hay una cosa que como desde el primer capítulo entiendes: dónde está cada uno y por qué hace cada cosa, y también la cantidad de contradicciones que tienen los personajes y dónde el espectador se coloca. Por los temas que toca, la serie coloca al espectador en un sitio en el que se plantea cosas sobre, bueno, muchos temas.
—La serie se llama Express, pero se toma todo el tiempo necesario para poder contar a los personajes: sus dramas personales e historias particulares. ¿Cómo fue componer a Bárbara dentro de un contexto con todo esto?
—Es verdad, y es cierto que una de las características de la serie es esa combinación de la acción y toda la parte más trepidante de la trama; pero luego hay espacio para entender dónde están los personajes y la psicología de los mismos. En el caso de mi personaje, Bárbara, pues era fundamental, porque era un personaje muy complejo que está en momento muy concreto de su vida. Y además una parte de la historia, una subtrama, es lo que le pasa, su trauma. Entonces era necesario colocarla en un sitio. Pero es verdad que todo el tema de las terapias, y esas intervenciones que así, rápidamente, aparecen ayuda mucho. Entonces, la edición de la serie influye mucho, ha sido clave para colocar la psicología del personaje y saber dónde está. Y luego, pues todo el trabajo que hicimos previo de ensayos, el trabajo con todo el equipo, actores y directores; pues fuimos haciendo todo para que se vea así de potente todo. Yo creo que siempre estás encontrando cosas, no solamente en el previo, sino en el set; e iba encontrando cosas de Bárbara hasta el último día.
—Fuiste anfitriona de muchos actores y actrices en Express, en tiempos donde las plataformas y la globalización marca un poco eso, y ahora estás en México para presentar el resultado del proyecto…
—La verdad es que yo me siento superquerida en México, y es mutuo, amo México. Tengo aquí familia. Es mi segunda casa y nunca he trabajado aquí, así que me encantaría.
—Es inevitable, siendo que Argentina tiene a un representante en la serie, preguntarte por él, ¿cómo fue la conexión y el trabajo con Esteban Meloni?
—Muy fácil la verdad, Esteban es un tremendo actor; además he tenido la suerte de verlo en teatro, y es brutal, hace lo que quiere y se transforma en lo que desee. En Express hace un trabajo muy sutil, muy pequeño, pero muy de verdad; y desde el minuto uno hemos conectado. Es verdad que también se ha trabajado todo con mucha verdad, porque los directores nos han llevado por ese camino, porque además Esteban y yo teníamos que improvisar mucho en todo el tema de las terapias. Entonces nosotros teníamos que crear una vida pasada, un background de los personajes para estar los dos en la misma sintonía e improvisar sabiendo de lo que estábamos hablando. Así que hicimos mucho trabajo de quedar los dos, de pensar juntos cómo fue nuestro pasado; y eso creo que se ve. Entonces esa química está, naturalmente que surgió. Porque surgió así, como ocurre a veces, es magia; y aparte también se trabajó el saber dónde estábamos colocados como personajes.