Frente a una ocupación del 100%, el director del Sanatorio Argentino, Ernesto Frachia, advirtió: “Hemos tenido pacientes fallecidos de 38 años”.
Desde hace días, la guardia del Sanatorio Argentino permanece cerrada. Sobre la persiana de metal, un cartel advierte: “Sanatorio con 100% de ocupación de camas”. En el marco de la segunda ola de la pandemia, el centro de salud atraviesa un gran momento de crisis. “Nos quedan algunas pocas camas destinadas para partos o situaciones así, pero estamos al 100%”, dice Ernesto Frachia, uno de los dos directores médicos. “Tenemos 50% de internados de Covid, con requerimiento de oxígeno la inmensa mayoría. La situación es de colapso”.
Además del desgaste del equipo y el faltante de insumos esenciales para la ventilación de los pacientes (como Milazolam y Fentanilo), el desembarco de la cepa de Manaos abre una nueva etapa para la situación sanitaria de la ciudad. De acuerdo al comunicado de Daniel Gollán, ministro de Salud de la Provincia, las muestras del 74% de los pacientes platenses tiene la variante brasileña.
“Es realmente preocupante”, apunta Frachia. “Primero, porque no sabemos a ciencia cierta el comportamiento de la variante. Hemos tenido pacientes fallecidos de 38 años, después de 15 días de ventilación. Indudablemente está tomando otra franja etaria. La población que menos se guardó o menos se cuidó es la que va de los 20 a los 50 años. La gente se fue a Brasil para Semana Santa, la gente se sigue reuniendo. Esto es una consecuencia de todo lo que la gente no se cuidó antes. Cada vez que pasaba frente a alguna cervecería me agarraba la cabeza. Es una locura… Si (Julio) Garro adoptó las restricciones solo fue porque se la vio venir. El problema es que los jóvenes ahora se mueren”, concluyó.