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CienciaSi las estructuras detectadas son lo que parecen, podría haberse hallado en China el material cromosómico de un dinosaurio de hace 125 millones de años.
09/10/2021 - 00:00hs
De acuerdo a un estudio publicado en la revista Communications Biology, los restos fósiles de un dinosaurio de hace 125 millones de años hallados en China podrían contener ADN. De esta forma, si las microscópicas estructuras detectadas son realmente lo que parecen, los científicos estarían en presencia de los restos de material genético más antiguos encontrados hasta ahora en un fósil de vertebrado.
Los investigadores de la Universidad de Linyi y del Instituto de Paleontología de Vertebrados y Paleoantropología de Pekín compararon el cartílago fosilizado de un ejemplar de Caudipteryx, un dinosaurio con plumas y del tamaño de un pavo real, con células de pollos modernos. Así, los científicos detectaron en los fósiles una serie de estructuras que se parecían mucho a la cromatina, o hebras de ADN, y a proteínas. Advierten, sin embargo, que su hallazgo no implica que se encuentren cerca de resucitar dinosaurios, como en la histórica película con el “mosquito en el ámbar”.
“Si hay alguna molécula de ADN o similar al ADN allí, será como una adivinanza científica, muy, muy modificada y alterada químicamente”, dijo Alida Bailleul, responsable de la investigación. Ese detalle, no obstante, no resta mérito al hecho de que si algún día los paleontólogos consiguen identificar material cromosómico en los fósiles, serán capaces de desentrañar fragmentos enteros de una secuencia genética antigua, lo que revelará nuevos datos sobre la fisiología de los dinosaurios.
Hasta hace poco, buena parte de la comunidad científica creía que el contenido celular se destruía por completo mucho antes de que los restos fosilizaran. Recientemente, sin embargo, se han encontrado algunas estructuras celulares milagrosamente bien conservadas en fósiles de gran antigüedad. Es el caso, por ejemplo, de células de helecho de 190 millones de años que fueron enterradas en cenizas volcánicas y fosilizadas tan rápidamente que algunas se “congelaron” justo en medio del proceso de división celular. En algunas de estas células se pueden ver, claramente, cromosomas.
El año pasado, la propia Bailleul y sus colegas informaron sobre la posible conservación de ADN en el cráneo de un ejemplar muy joven de Hypacrosaurus, una especie de dinosaurio con pico de pato que vivió hace 75 millones de años y que fue encontrado en Montana. El hipotético ADN se encontró en el cartílago, el tejido conectivo que forma las articulaciones. “Estábamos específicamente interesados en el cartílago porque es un tejido muy bueno para la preservación celular, quizás incluso más que el hueso”, concluye Bailleul.