La carrera por la vida, terminó en la muerte

El brillante sol del domingo no alcanzó para iluminar las mentes de los organizadores de la media maratón de Buenos Aires, que ayer se llenó de luto por la muerte de un participante y la internación de otro. 

Los 21 kilómetros (la maratón completa tiene 42), se vio sacudida por la tragedia, cuando apenas habían transcurrido quince minutos y un corredor se desplomó en el piso y murió en el acto. Se trata de Osvaldo Carrizzo, de 55 años, quien estaba transitando parte del trayecto desde la Avenida Figueroa Alcorta, en la zona de Belgrano, hasta el barrio de San Telmo. 

Carrizo, al igual que otro maratonista de 37 años que tuvo que ser asistido por el SAME, fue operado de urgencia y permanecía internado anoche en terapia intensiva, se anotó en la competencia sin mayores requisitos.

Este evento, organizado por la Fundación Ñandú, coordinado por el gobierno de Buenos Aires y patrocinado por el diario Clarín, anota a cualquier persona que tiene ganas de participar, con apenas un certificado de buena salud, sin que esto implique  la exigencia de un estudio más profundo como una ergometría o un electro realizado por un cardiólogo profesional. Incluso, este tipo de eventos suele incentivar a muchas personas que desconocen su verdadero estado físico, ya que según revelaron los médicos consultados por este diario, hay patologías asintomáticas e invisibles que pueden aparecer como un factor sorpresa sin un estudio o chequeo previo, y terminar con el desenlace de ayer. 

Desde hace varios años, el diario Hoy viene advirtiendo sobre las precauciones que deben tomarse para realizar una actividad física, ya que sea amateur o profesional. 

Sin ir más lejos, en unos días se cumplirán dos años del fallecimiento de un jugador de la categoría Senior de la Liga Amateur Platense de Fútbol, por lo cual esta entidad afronta un juicio millonario contra la familia de la víctima. 

Si bien nadie le va a devolver la vida a Carrizo, ¿se hará cargo el gobierno de Buenos Aires de la muerte en la carrera?.

EL COMUNICADO OFICIAL

La nota triste de la jornada fue el fallecimiento -por un paro cardíaco- de un corredor, poco después de la largada. Osvaldo Carrizo, santafesino de 55 años, se desvaneció a la altura del kilómetro 4. Ello sucedió a las 8.00 de la mañana y al instante fue atendido por un cardiólogo y trasladado en la ambulancia -que se encontraba allí- hasta el Hospital Fernández, donde llegó 7 minutos después. Sin embargo, no pudo ser recuperado y la causa del deceso fue "paro cardiorrespiratorio, fibrilación venticular". Tanto desde la Asociación Ñandú, organizadora de la competición, como del Gobierno de la Ciudad, se brindó la asistencia inmediata y las medidas de asistencia a sus familiares.