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CienciaLos individuos del Pleistoceno poseían una masa cerebral más grande que la promedio del actual Homo sapiens.
01/11/2021 - 00:00hs
Un equipo de científicos de la Universidad de Boston descubrió que el cerebro humano se encogió significativamente y de forma inesperada hace 3.000 años. De acuerdo al estudio publicado en la revista Frontiers in Ecology and Evolution, la masa cerebral del actual Homo sapiens es un 10% menor que la de los individuos que habitaban el planeta Tierra durante el Pleistoceno. Para comprobarlo, el equipo interdisciplinar de investigadores estudió los datos obtenidos de un conjunto de 985 cráneos humanos fósiles y modernos.
“Demostramos que el tamaño medio del cerebro hace 3.000 años era de 1.450 cc, mientras que el cerebro medio de hoy es aproximadamente 100-150 cc menos, más o menos una reducción de tamaño del 10%”, dijo James Traniello, profesor de Biología en la Universidad de Boston y coautor del estudio. “Esta pérdida es un poco menor que la de una pelota de tenis”. Esa reducción, señalan los investigadores, ocurrió por el surgimiento de la inteligencia colectiva (el intercambio de información distribuida a través de redes sociales de grandes grupos de humanos) y la división de trabajo.
En las primeras etapas de la evolución humana, el cerebro creció de forma significativa. Si el de un pequeño australopiteco de hace más de 3 millones de años apenas superaba los 400 gramos (peso similar al de un chimpancé o un gorila), el del Homo habilis, (conocido por el uso de herramientas hace 1,9 millones de años), menudo todavía, alcanzaba los 600 gramos. Esta tendencia continuó en África con H. rudolfensis, de cuerpo más grande (735 gramos), y H. ergaster (850 gramos). En comparación, la masa cerebral promedio de un Homo sapiens, la especie a la que todos pertenecemos, es actualmente de 1.350 gramos.
Para desentrañar el enigma de la reducción, los investigadores emplearon una curiosa perspectiva: utilizaron patrones de evolución del cerebro de las hormigas. “Proponemos que esta disminución se debió a una mayor dependencia de la inteligencia colectiva; la idea de que un grupo de personas es más inteligente que la persona más inteligente del grupo, a menudo llamada la sabiduría de las multitudes”, concluye Traniello.