En la jornada pasada, dejaron de funcionar en 11 y 520, 60 y 116, 122 y 38, 13 y 38, 40 y 122, y 119 y 60.
Durante el comienzo del mes de febrero, y de forma simultánea a las lluvias que se registraron durante la jornada del lunes en la región, varios semáforos dejaron de funcionar en distintas esquinas de la ciudad.
En algunos casos la situación obedecía a falta de suministro de energía, pero en otros a cortocircuitos que se habrían provocado por la humedad y el agua que afectaron el funcionamiento de las señalizaciones viales, indispensables para ordenar el tránsito en la región.
Ayer por la mañana, varios vecinos reportaron fallas en el funcionamiento de los semáforos sobre la Avenida 520, desde 7 hasta 11 inclusive.
Los semáforos de 7 y 520, como así también los de 5 y los de 4 y 520 volvieron a funcionar con normalidad durante la mañana. No corrió con la misma suerte el que está en 11 y 520, a doscientos metros del de 13 y 520.
Tampoco funcionaron durante gran parte de la jornada del martes los semáforos que están en 13 y 38 (provocando un gran caos en horas de la mañana), el de 60 y 116 en uno de los ingresos laterales al Bosque de la ciudad; el de 60 y 120 frente al ingreso a la facultad de medicina; en 40 y 122 y en 38 y 122.
Estos últimos semáforos son responsabilidad compartida entre Ensenada y La Plata, pero en la esquina de 40 y 122 directamente el viento corrió de lugar la enorme señalización dejándola prácticamente paralela a la vereda.
Si bien algunos de los semáforos se fueron reparando en el transcurso de la tarde del martes, las calles humedecidas y la falta de señalización terminó favoreciendo el escenario para algunos accidentes.