Según Unicef, la mitad de los adolescentes argentinos son pobres
Basado en cifras de organismos oficiales como el Indec y Anses, Unicef se hizo eco ayer de la peor imagen de la realidad argentina: la mitad de los jóvenes argentinos de entre 13 y 17 años son pobres.
Así se desprende del informe titulado Posicionamiento sobre adolescentes, que enumera problemáticas vinculadas con la pobreza como la deserción escolar, inaccesibilidad a métodos anticonceptivos y embarazos no deseados.
Según la radiografía realizada por el organismo internacional, el 51% de este sector es pobre, el 45% no termina el secundario y medio millón de adolescentes ni siquiera comenzaron el primer año.
Al respecto, la representante de Unicef Argentina, Florence Bauer, precisó que “si bien los datos son conocidos, cuando se compilan todos juntos podemos tener una mirada más abarcadora sobre una fase de la vida particularmente dificultosa. Lo que vemos es que muchos indicadores se complican en la adolescencia”.
Entre los principales problemas se encuentra el embarazo: seis de cada diez chicas no tienen acceso a métodos anticonceptivos, cada año nacen 3.000 niños cuyas madres son menores de 15 años y seis de cada diez embarazos no fueron planificados.
En lo que respecta a materia educativa, el informe indicó que tres de cada diez chicos que van al secundario lo hacen en años que no son acordes a su edad y el 45% no llega a terminarlo. El 29% aduce que el abandono se debe a que no lo consideran necesario o se aburren.
Además, Unicef advirtió sobre las muertes evitables como uno de los flagelos que cruzan las vidas de los jóvenes. En 2015, 3.533 chicos de entre 10 y 19 años murieron por causas externas, es decir, diez muertes por día a causa de accidentes de tránsito, suicidios o agresiones.