Un homenaje muy especial en Plaza Belgrano por el Día de la Bandera

No fue un Día de la Bandera más en la ciudad de La Plata. Entre la pandemia, el último día del otoño y la antesala a la Jornada del Padre, se vivió una mañana atípica en la región.
Mientras en algunas calles y accesos a la ciudad comenzaron a intensificarse los controles de circulación (ver aparte), en la Plaza Belgrano se llevó a cabo el tradicional izamiento de la Bandera en el monumento al símbolo patrio.

Esta vez, el intendente Julio Garro no estuvo presente, ya que formó parte de una ceremonia virtual con el gobernador Axel Kicillof. Sin embargo, el secretario de Cultura de la Municipalidad, Martiniano Ferrer, encabezó la ceremonia de muy bajo perfil, izando el símbolo patrio mientras el tenor Rubén Martínez entonaba la canción Aurora.

Apenas un puñado de vecinos, que de forma circunstancial paseaban a sus mascotas por el lugar, pudieron presenciar lo que terminó ocurriendo en 13 entre 39 y 40 y aplaudieron cuando la Bandera argentina comenzó a flamear en el cielo platense.

En contacto con el diario Hoy, el secretario de Cultura del Municipio de La Plata consideró que se trató de un “día que no puede dejarse pasar en el almanaque institucional, político y platense. Es un día simbólico y es importante que estemos acá de alguna forma, festejando y cantando el Himno. Todos los años este lugar se llena de chicos de cuarto grado de todo el partido de La Plata jurando por la Bandera”, comentó.

Por su parte Rubén Martínez, el tenor internacional platense que creció en la barrio de La Loma en la zona de 16 y 32, no escondió su emoción por el momento que le tocó encabezar. “El 20 de junio de 1982, con 20 años, me tocó jurar a la Bandera en este lugar. Para mí es muy emocionante volver a cantar acá en esta plaza”, comentó el hombre que realizó una importante carrera en la lírica, consolidándose como artista en Italia.

Según pudo saber este diario, la municipalidad trabajará en el futuro para restablecer y recuperar el museo que en algún momento funcionó debajo del enorme monumento que está en la plaza de 13 entre 39 y 40.