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Ocurrió en cercanías al límite internacional con la República de Chile.
A pocos días del balotaje, los candidatos mostraron sus planes sobre poder adquisitivo, seguridad, juventud, política internacional y medioambiente, entre otros temas.
21/04/2022 - 00:00hs
En el marco del gran debate camino al balotaje, el mandatario liberal Emmanuel Macron acusó a su adversaria de extrema derecha Marine Le Pen de “depender del poder ruso” y del presidente Vladimir Putin por un préstamo que tomó de un banco ruso. Frente a los millones de ciudadanos franceses que siguieron la transmisión a través de la televisión y la plataforma Twitch, la postulante de la Agrupación Nacional (RN) señaló que el agravio “no es cierto y es bastante deshonesto”.
A cuatro días de la segunda vuelta, los candidatos desarrollaron sus medidas sobre poder adquisitivo, seguridad, juventud, política internacional y medioambiente, entre otros temas. Aunque Macron aventaja en 12 puntos a Le Pen, según el último sondeo de Ipsos/Sopra Steria, solo un 69% de los franceses dicen estar seguros de ir a votar, entre ellos unos 6 de cada 10 electores del excandidato de ultraizquierda Jean-Luc Mélenchon.
Eliminado en primera vuelta pese a un gran desempeño, Mélenchon instó en la noche del martes a su electorado a declinar abstenerse, a no conceder “un solo voto” a Le Pen, y, si bien apoyó a Macron, lo hizo de manera implícita, informó la agencia de noticias francesa AFP. De acuerdo con los últimos sondeos, Le Pen está considerada como la que mejor comprende los problemas de la gente, y Macron como el de mejor imagen internacional.
“Usted depende del poder ruso y del señor Putin”, dijo Macron. “Cuando habla de Rusia, usted le habla a su banquero”. La acusación se remonta a 2014, cuando el Frente Nacional (FN), partido predecesor del RN, contrató un préstamo de 9 millones de euros (unos 9,8 millones de dólares) con un banco ruso que cerró en 2016. Finalmente, la deuda terminó en manos de una empresa dirigida por exmilitares rusos.
En medio de la suba de precios de la energía por la intervención militar de Rusia en Ucrania, Macron buscó presentar a su rival como complaciente con Moscú, una mirada que alentaron también el encarcelado opositor ruso Alexéi Navalni y el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski. El mandatario ucraniano fue todavía más allá y recomendó a Le Pen que admita que “se equivocó”.
“Vivimos un momento de mucha gravedad. El papel de Francia y de Europa es apoyar a Ucrania”, remarcó Macron, candidato de La República en Marcha (LREM). Para el mandatario, “una Europa fuerte (...) con potencias fuertes como Francia” puede pesar en la escena internacional. Le Pen reiteró que la “agresión del pueblo ucraniano es inadmisible” y aseguró apoyar “una Ucrania libre”, independiente de Estados Unidos, de la Unión Europea (UE) y de Rusia.
La candidata de Agrupación Nacional, de 53 años, debe romper la tendencia favorable de su rival de La República en Marcha, de 44 años, quien agita, como en 2017, cuando ya derrotó a Le Pen, el miedo de la llegada de la extrema derecha al poder. El debate de 2017 representó una debacle para Le Pen, a la que se le reprochó su “agresividad” y su “falta de preparación”. Días después, reconoció un “error estratégico”. Como pasó con su padre, Jean-Marie Le Pen, en 2002, la mayoría de candidatos derrotados, así como artistas, deportistas y expresidentes, llamaron
esta vez a votar por el actual mandatario liberal o contra la heredera del Frente Nacional (FN), el nombre que tenía el partido hasta 2018.
A diferencia de 2017, cuando con un 66,1% de los votos se proclamó por primera vez presidente, Macron debe defender ahora su gestión, marcada por protestas sociales, pandemia de coronavirus y consecuencias de la guerra en Ucrania.