La ONU comenzó a investigar los crímenes de guerra en Ucrania

En medio del conflicto bélico que se recrudece entre Ucrania y Rusia se reunió el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en el que se aprobó iniciar una investigación sobre los crímenes de guerra que se hayan cometidos desde el 24 de febrero.

El Consejo está presidido por la Argentina y, con 33 votos a favor, dos en contra y 12 abstenciones, avanzó con la propuesta de pensar una investigación sobre las “atrocidades” que se atribuyen a Rusia. Esta decisión se tomó luego de escuchar un informe elaborado por la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet.

Con esta resolución se “reafirmó la necesidad de que los Estados resuelvan sus disputas por medios pacíficos, expresó su profunda preocupación por las víctimas civiles del conflicto y su condena por las violaciones y abusos a los derechos humanos y al derecho internacional humanitario”, señalaron en un comunicado.

“Asimismo, reiteró su exigencia de que cesen las hostilidades contra Ucrania y solicitó a la Alta Comisionada que presente una actualización oral sobre la grave situación humanitaria y de derechos humanos en Mariúpol en la 50ª sesión ordinaria del Consejo cuyo inicio está previsto para el día 13 de junio próximo”, señalaron.

A su turno, la expresidenta de Chile, Bachelet aseguró que su área “sigue verificando denuncias de violaciones del derecho internacional de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario, muchas de las cuales pueden constituir crímenes de guerra”.

Por su parte, la primera viceministra de Relaciones Exteriores de Ucrania, Emine Dzhaparova, participó por videoconferencia de la sesión y aseguró que “miles de personas de mi país perdieron la vida. Los bombardeos y los disparos rusos forman parte de nuestra vida cotidiana”.

“La agresión rusa implica el descubrimiento cada día de hechos más macabros”, afirmó el embajador francés Jérome Bonnafont.

En tanto, también se expresó el embajador ruso ante la ONU, Guenadi Gatilov, quien publicó un comunicado en el que denunció “la demonización de Rusia por parte del occidente colectivo”, y habló de una investigación que no es independiente y acusó al Consejo se haberse convertido en un foro “para asestar golpes políticos”.