Son un grupo de mercenarios que responden a los intereses de Putin pero no son parte de su ejército.
El Grupo Wagner (GW) es un batallón de mercenarios paramilitares que operan bajo órdenes del gobierno ruso pero no son parte de sus fuerzas armadas oficiales. Su primera aparición fue en la invasión a Crimea en 2014, donde usaron sus típicos uniformes y pasamontañas verdes ganado el seudónimo de ‘’hombrecitos verdes’’. Desde ese entonces han realizado operaciones en Siria, Libia, Chechenia, República Centroafricana, Sudán, Mozambique, Mali y Venezuela. En Ucrania se los acusa de organizar y entrenar a los separatistas de los óblast de Lugansk y Donetsk. La Inteligencia alemana afirma que GW estuvo en la zona de Bucha al momento de la matanza realizada allí.
En los últimos días el GW realizó una fuerte campaña de reclutamiento, pagando hasta 3.000 dólares al mes para ir a luchar en Ucrania. Algunos veteranos de la organización se burlan de la situación afirmando que los hombres irán al frente para que los niños puedan descansar, haciendo referencia a las tropas sin experiencia ni entrenamiento desplegadas por Rusia.
Entre sus fuentes de financiamiento está el servicio privado, como el que cumplen con el gobierno de Mali donde les pagan 10 millones de dólares al mes. También son financiados por el gobierno ruso que hace uso de sus servicios en países de su interés. El dueño de esta empresa es Yevgeny Prigozhin, apodado ‘’el chef de Putin’’ porque es dueño de todos los restaurantes del Kremlin y otros establecimientos gastronómicos de lujo en Rusia. Yevgeny es también dueño de la Internet Research Agency, una agencia de troll y hackers acusada de intervenir en las últimas dos elecciones presidenciales de EE.UU. A su vez las operaciones del GW en Mali le valieron la obtención de importantes minas de oro y diamantes, mientras que en Siria se apoderó de importantes yacimientos petrolíferos.
El segundo al mando y director de este batallón es un neonazi asumido llamado Dmitry Utkin, que le dió el nombre de Wagner al grupo por el fanatismo que Hitler tenía con ese compositor. Este hombre está en el frente con sus tropas, formó parte de la toma de Crimea y en el último año se dedicó al entrenamiento de los grupos separatistas del Donbass. Hoy en día hay entre 3.000 y 8.000 soldados del GW operando en Ucrania, y se espera que cada vez lleguen más.