Hasta el momento, el gobierno británico ha elaborado un listado de 33 países considerados de “alto riesgo”, entre los que se encuentran Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Portugal, Surinam y Sudáfrica.
Desde las primeras horas de la jornada pasada, los viajeros que ingresen al Reino Unido desde los países incluidos en la “lista roja” deben llevar adelante una cuarentena en los hoteles asignados por las autoridades.
De acuerdo a lo informado por el Ejecutivo británico, los pasajeros deberán hacerse cargo del costo del alojamiento, tasado en 1.750 libras esterlinas (2.400 dólares) por persona.
Durante la cuarentena, los recién llegados no podrán salir de sus habitaciones. De hecho, el gobierno puso en marcha un plan de vigilancia para asegurar que se cumplan todas las medidas.
Quienes se opongan a pasar los 10 días dentro de alguno de los 16 hoteles dispuestos por las autoridades deberán pagar una multa de hasta 10.000 libras. En tanto, el simple hecho de ocultar haber estado en alguno de los países de la “lista roja” supone una pena de prisión de hasta 10 años.
Hasta el momento, el gobierno británico ha elaborado un listado de 33 países considerados de “alto riesgo”, entre los que se encuentran Argentina, Brasil, Chile, Uruguay, Portugal, Surinam y Sudáfrica.
Con la implementación de esta nueva medida, los viajeros de estos países que llegaron a los principales aeropuertos del Reino Unido fueron trasladados en colectivos a los diferentes hoteles.
En este sentido, Charlie Islam-Harry, directora del hotel St. Giles, ubicado en las inmediaciones del aeropuerto londinense de Heathrow, explicó: “No puede ser fácil para ellos estar encerrados en una habitación 10 días, sin ir a ningún lado, así que realizamos comprobaciones, nos aseguramos de que están bien”.
Una vez en las instalaciones, los pasajeros deberán atravesar una cámara térmica que mide la temperatura de los recién llegados. A su vez, estas personas son sometidas a un protocolo especial de sanitización.
Más allá de las intenciones de las autoridades británicas, el costo de la cuarentena fue criticado por muchos habitantes que residen en las islas europeas. “Yo no puedo pagar 1.750 libras de hotel cuando tengo mi propia casa en Londres”, sostuvo Santiago Peluffo, escritor argentino que reside en Reino Unido desde 2012.
Por su parte, el ministro de Sanidad, Matt Hancock, aseguró que, debido a la aparición de nuevas variantes del coronavirus, “hay que ir más lejos” con las medidas. “Las reglas que entran hoy en vigor reforzarán el sistema de cuarentena y aportarán otro nivel de seguridad en las fronteras contra las nuevas cepas”, añadió.