La industria de los despidos

Adidas, Freddo, Electrolux, Helvética, General Motors. Nombres propios y conocidos por todos. Apenas ejemplos, botones de muestra de un país en el que la industria va camino a convertirse en tierra de nadie. ¿Qué otra cosa, sino eso, es el déficit cero (cero inversión, a la que llaman gasto) que reclama el FMI y se propone cumplir el Gobierno?

El caso es que la fábrica de electrodomésticos Electrolux licenció a todo su personal, la automotriz General Motors inició un esquema de suspensiones rotativas y la productora de acoplados Helvética paralizó su producción hasta fin de año. La caída del mercado interno y la apertura indiscriminada de importaciones son la razón de las medidas que, solo en los ejemplos, afectan a unos 2.500 trabajadores.

Producto de la crisis, la última junta directiva de la Unión Industrial Argentina (UIA) reclamó una batería de medidas para recomponer la cadena de pagos, afrontar los costos en luz y gas, y promovover la producción, ahora que lo único que vale es la especulación: las altas tasas de interés, que imposibilitan el financiamiento, hablan por sí solas del modelo de país que impone Cambiemos.