Conmoción en Ensenada: un hombre murió electrocutado

Un lamentable episodio ge­neró conmoción en la vecina localidad de Ensenada y alrededores, luego de que se conociera que un hombre de 51 años

perdió la vida tras recibir una descarga eléctrica mientras intentaba destapar los desagües. Al parecer, estaba trabajando subido a una escalera de metal, lo que pueda haber potenciado el shock que lo fulminó en el instante.

De acuerdo a lo que trascendió, todo ocurrió en horas de la noche, alrededor de las 21, en una vivienda ubicada en la zona de las calles 123 y 48, en el barrio El Dique. La víctima se había subido momentos antes al techo de su casa para realizar una serie de reparaciones debido a las constantes lluvias que azotan a le región desde la última semana.

La intención del damnificado era limpiar las canaletas de la propiedad que, aparentemente, estaban tapadas. Sin embargo, según los testimonios aportados por los testigos, cuando recién había comenzado a realizar esta tarea recibió una fuerte descarga eléctrica que puede haber sido potenciada por la utilización de una escalera metálica.

Inmediatamente después de lo sucedido, se dio aviso al servicio de emergencias 911. En escasos minutos se montó un gran operativo en el lugar, que contó con la presencia del cuerpo de Bomberos, como así también del personal de la empresa proveedora de energía, quienes se hicieron presentes para constatar lo que había ocurrido.

Además, arribaron varios móviles policiales, acompañados de una ambulancia del SAME. Fueron los médicos quienes comprobaron el deceso del hombre al notar que ya no contaba con signos vitales. Según relató la esposa de la víctima, su marido falleció debido a una electrocución que sufrió mientras removía los objetos que obstruían los desagües.

Si bien no existen demasiadas dudas sobre el caso, se realizaron las pericias de rigor en la finca y pronto tomo intervención la Unidad Funcional de Instrucción de turno para dar paso a una investigación con la apertura de la causa judicial que, en principio, fue caratulada como “averiguación de causales de muerte”.