Cuádruple crimen de La Loma: procesaron al remisero que atestiguó contra el "Karateca"

Una fiscal lo citó a indagatoria. Es el testigo “clave” que llevó a prisión, y a juicio, al “Karateca” Martínez.

Inconsistencias. Verdades a medias. Silencios inoportunos.  Se miente cuando no se dice la verdad. Pero también cuando se la calla o se la tergiversa. El delito de falso testimonio en una causa judicial, y más en un cuádruple homicidio, tiene una pena de hasta 10 años de cárcel. 

En las primeras fojas del expediente el remisero Marcelo Tagliaferro se convirtió en el testigo “clave” de la fiscalía que investigó y llevó a juicio la causa por los brutales crímenes de Bárbara Dos Santos, su pequeña hija Micaela Galle, su madre Susana De Bartolle, y la amiga Marisol Pereyra. 

Pero su intervención en la causa siempre estuvo bajo sospecha. El día que declaró lo hizo luego de pasar por el estudio del abogado Fernando Burlando, de calle 8, 54 y 55. ¿Por qué un testigo debía asesorarse en la previa? En estas actuaciones, el mediático letrado asiste “solamente” al padre de la menor asesinada.

Tagliaferro por entonces remisero, conductor de Marisol en la noche del cuádruple homicidio, dijo en su primera declaración que la llevaba como “remisero”, luego que tenían pensado salir, que existía un vínculo entre ellos. Y que habían ido a buscar a Susana. 

Nadie reparó en esas cambiantes declaraciones, porque por entonces a la fiscalía de instrucción le sirvió su sorpresivo “reconocimiento”. Dijo que desde su remis, por el espejo retrovisor vio a Osvaldo “el karateca” Martínez. 

Ayer, desde otra fiscalía, a cargo de la doctora Ana Medina, se lo procesó y citó a Tagliaferro a declaración indagatoria por el delito de falso testimonio. 

Medina fijó la audiencia para el 26 de marzo. En tribunales se informó que Tagliaferro estuvo buscando abogado en las últimas horas porque desde el estudio Burlando ya no lo querían asistir. 

El “Karateca” está sindicado junto al albañil Javier “La Hiena” Quiroga. Ambos están a la espera del juicio oral. El cuádruple crimen se produjo el 27 de noviembre de 2011. 

En ese expediente judicial, figuran varios testigos que, en principio, desacreditan la versión de Tagliaferro. Además el 25 de octubre último, declaró un excompañero de detención de “La Hiena” Quiroga quien sostuvo que el detenido le confesó haber participado en la matanza junto a un amigo, y no mencionó al “Karateca” Martínez. 

De acusador a acusado

Tagliaferro declaró tres veces. Las primeras dos ante personal policial en las que sostuvo que no estaba en condiciones de reconocer a la persona que salió del trágico PH de 28 entre 41 y 42, donde se cometieron los cuatro homicidios. El tercero de los relatos lo realizó ante el fiscal Álvaro Garganta donde afirmó que Martínez era la persona que salió de la escena del crimen. 

Antes de esa declaración, como se mencionó, Tagliaferro estuvo “asesorado”. 

Para el fiscal Garganta y el juez de garantías Federico G. Atencio, el móvil del crimen fueron los celos enfermizos que Martínez tenía hacia su novia Bárbara, y contrató a Quiroga como sicario. 

Quiroga dijo que el autor de la masacre fue Martínez. Pero el ADN de Quiroga apareció en el cuerpo de dos de las víctimas. 

Compañero de “ranchada” en la U34

Daniel Oscar Peña Devito compartió “ranchada” con “La Hiena” Quiroga en la Unidad 34 de Romero. Asegura que el albañil se quebró y confesó que fue el “único” autor de los homicidios en el barrio La Loma. 

En enero de 2013 pidió declarar ante el fiscal Garganta y ante el juez de garantías Atencio, pero nunca fue escuchado. 

En octubre pasado expuso su versión ante la fiscal Ana Medina. En su extensa exposición, Peña Devito indicó que Quiroga se quebró y confesó que fue al PH de 28 entre 41 y 42 a “robar” y luego “matar” a la dueña. Dijo que “La Hiena” no estaba solo, lo acompañaba un amigo del barrio, que habría sido la segunda persona que participó de la masacre, pese a que en la escena del crimen se encontraron pisadas de un solo tipo de calzado.