Espeluznante infanticidio: vecinos quisieron linchar a la abuela de la beba asesinada

Una beba de tres meses fue asesinada en las últimas horas en el interior de una casa, y los vecinos de la zona estuvieron a punto de matar a golpes a la abuela, a quien responsabilizan por el brutal infanticidio que conmueve a buena parte de la Argentina.

Por lo que este multimedio pudo saber de fuentes policiales, todo tuvo lugar el sábado, cuando la sospechosa llevó a la víctima, identificada como Ana María Patiño Fabro, hasta el hospital Finochietto de Florencio Varela, sobre la zona sur del conurbano. Sin embargo, para cuando arribó la criatura, ya nada podía hacerse porque estaba muerta. De acuerdo a los profesionales que la atendieron en la sala de guardia, la damnificada tenía a simple vista lesiones en el rostro y en el cuello, compatibles con un mecanismo de asfixia. “Creemos que la estranguló”, sentenció un pesquisa, aunque aclaró que será la correspondiente operación de autopsia a la que será sometido el cuerpo la que determine tanto la causa como la data del deceso.

Por la magnitud del hecho y al tratarse sin duda alguna de un caso criminal, los facultativos le pasaron el parte a la Policía.

“Homicidio calificado”

Entonces se hicieron cargo los efectivos de la comisaría Décima de Ingeniero Budge y la fiscal Marcela Juan, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 14 de Lomas de Zamora. Todos se dirigieron sin pérdida de tiempo hasta el inmueble donde se habría producido el homicidio; pero, antes que ellos, actuaron los frentistas de la zona.

Anoticiados de lo que había sucedido, resolvieron ejercer la justicia por mano propia y atacaron a la abuela de la beba, de 51 años. La tiraron al suelo y, mientras uno filmaba y pedía que la mataran, los otros le pegaban trompadas y patadas, al grito de “¿sabés lo que muchos darían por tener un hijo?”.

Finalmente, la mujer fue capturada por la Policía y en las próximas horas será indagada por el delito de “homicidio calificado por el vínculo”.

Ayer, en tanto, varios vecinos se reunieron en la puerta de la finca del horror para pedir justicia. Algunos llevaban pancartas que rezaban “Era solo una bebé” y “Sinvergüenza asesina”.