Macabra amenaza al presidente de una asamblea vecinal

Se trata de un referente de El Mondongo que desde hace años viene denunciando la delincuencia y el narcotráfico que existen en la zona. Le dejaron un ataúd en la puerta de su casa y ahora tendrá custodia policial

Daniel Domínguez lucha desde hace años contra la delincuencia, el narcotráfico y todo acto que se aleje de la ley para dar tranquilidad a los vecinos de su barrio, en El Mondongo. Pero durante la madrugada de ayer sufrió una grave amenaza que atenta claramente contra su seguridad: sujetos desconocidos, am­parados por la oscuridad, le dejaron en la puerta de su casa un ataúd, en un claro mensaje intimidatorio que ya está siendo analizado por investigadores judiciales y policiales. 

Se trata de un hombre que preside la asamblea vecinal de dicho barrio, la cual es integrada por entre 12 y 14 personas de manera fija, y se reúne semanalmente para tratar la problemática de la inseguridad. 

Ayer abrió a las 5.55 el portón de su vivienda de 117 entre 64 y 65 para ir a cumplir sus funciones laborales diarias, cuando se topó con una sorpresa desagradable: un pequeño féretro había sido puesto justo frente a la puerta de su domicilio. 

En diálogo con este medio, dijo que “encontrarse con esto cuando vas a trabajar no es nada grato. Al verlo, lo primero que pensé fue agarrar un trapo, correrlo e ir a laburar, pero entonces decidí que lo mejor era no hacerlo. Vengo denunciando hechos delicados y es mejor que se investigue, porque es una amenaza y así me lo dijeron desde la Policía y la misma fiscalía. Uno tiene familia y trata de hacer las cosas lo mejor posible. Ahora están viendo si me ponen custodia”.

Ya había sido intimidado 

Sobre lo que le dejaron, relató que “es un ataúd chiquito, de unos 40 centímetros por 15: es una especie de urna funeraria. De inmediato llamé al 911 y enviaron un móvil del Comando de Patrullas. Después vinieron los peritos de la Policía Científica y también estuve en contacto con la gente de la Procuraduría y del Ministerio de Seguridad. Todos están al tanto de lo que me pasó”. 

Añadió que “acá en el barrio luchamos contra la droga y contra la delincuencia y somos nosotros los que ponemos la cara con los vecinos. Presido desde hace más de dos años la asamblea vecinal de El Mondongo y soy la cara visible. Uno pelea con todas estas cosas y tenemos estos problemas. Esto fue una amenaza y vamos a ver cómo seguimos adelante”. Para finalizar, recordó que “tiempo atrás me habían roto el vidrio del portón, y ahora me pasó esto”.