Preventiva para el salvaje que mató por la espalda a su pareja en Berisso
La fiscalía tomó la decisión por el riesgo de fuga, los antecedentes del implicado y un posible entorpecimiento en la causa. El caso ocurrió hace poco más de un mes.
La fiscalía tomó la decisión por el riesgo de fuga, los antecedentes del implicado y un posible entorpecimiento en la causa. El caso ocurrió hace poco más de un mes.
04/09/2025 - 00:00hs
Dictaron prisión preventiva a Ángel Nicolás Castro, el joven acusado del femicidio de su pareja Yésica Duarte en julio de este año en Berisso y quien quiso suicidarse tras cometer el crimen.
La causa, que en un principio estaba a cargo de la UFI N°1 y ahora está en manos de la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°13 especializada en Violencia de Género, tuvo avances luego de que la fiscal Mariana Ruffino haya resuelto proceder a la prisión preventiva de Castro por el delito de “homicidio triplemente calificado, por el vínculo, por haberse cometido en un contexto de violencia de género y mediante el uso de un arma de fuego”.
Durante el desarrollo de la investigación Ruffino presentó nuevas pruebas y testimonios, los cuales convalidaron la responsabilidad del acusado en la causa.
En el documento destaca que la medida se resolvió ante la materialidad ilícita, la adecuación típica, la autoría responsable, la procedencia de la cautelar y la no declaración de Castro.
Se destacó además que existe riesgo de fuga y de entorpecimiento de la investigación, sumado a la existencia de amenazas previas, la gravedad del hecho y que el delito atribuido solo contempla la pena de prisión perpetua, por lo cual no existe la posibilidad de una excarcelación.
Un niño, clave
El joven asesinó a Duarte el pasado 27 de julio de dos disparos en el abdomen y la espalda y tras cometer el crimen intentó suicidarse, pero logró sobrevivir.
Se supo que desde 2013 Castro acumula causas por tenencia ilegal de armas, encubrimiento y homicidio agravado.
Al momento del crimen, el acusado se encontraba bajo arresto domiciliario en el marco de otra causa por homicidio calificado, supervisado por la Dirección de Monitoreo Electrónico.
Todo sucedió delante del hijo de siete años de la víctima, quien fue rescatado por un vecino y fue clave por su testimonio, ya que en un principio la madre del imputado había dicho que se había tratado de un robo, desligando de responsabilidad a Castro. De hecho, la progenitora hasta escondió el arma en su propia casa, que luego fue hallado y a ella se le inició una causa penal.