Robó en una casa y hasta se probó la ropa del dueño del lugar

El insólito episodio se registró en un inmueble de City Bell, cuando un ladrón sorprendió a una estudiante de Arquitectura y a su hija. Antes de escapar, pidió si podía llevarse una bicicleta que había en la finca

Una estudiante de Arquitectura de 42 años y su hija de 18 terminaron maniatadas tras sufrir ayer un robo en su casa de City Bell, al ser sorprendidas por un delincuente que escapó con una importante cantidad de dinero en efectivo y otros elementos de valor, informaron ayer fuentes policiales. 

El hecho se materializó cerca de las 14 en una vivienda emplazada en calle 20 entre 485 y 486, donde reside una familia. Al momento del ilícito se encontraba Celina, que se hallaba en el comedor viendo televisión, y su hija.  

La mayor de las dos escuchó ruidos y entonces vio al maleante, que llevaba el rostro cubierto y hacía ademanes con sus manos, como si tuviera un arma de fuego. “Sin embargo, ninguna de las víctimas vio un arma”, aseguró un pesquisa ante este medio. 

El paso siguiente del hampón fue el típico en estos casos: amenazó a la mujer y le exigió no solo el dinero que hubiera en el lugar, sino todos los elementos de valor y las joyas. Así, se adueñó de por lo menos $10.000 y de los dos teléfonos celulares de las perjudicadas. Luego se apoderó de una tablet y alhajas, que guardó en un bolso, también propiedad de las mujeres. 

Un requerimiento llamativo 

Para garantizarse la fuga, decidió atar las manos de las presentes. “Utilizó unos cables que encontró en la propiedad”, de acuerdo al relato oficial, y luego, ya con el botín en su poder, emprendió la huida. 

En diálogo con Trama Urbana, Celina contó: “Para escapar, (el ladrón) nos pidió si se podía llevar la bicicleta de mi hija. Constantemente decía que estaba con un cómplice que lo esperaba afuera, pero cuando se fue en la bici, lo hizo solo, llevándose también el control del portón”. 

Una vez que las víctimas pudieron desatarse, tocaron el botón antipánico que tienen. “Los primeros que llegaron fueron los del Comando de Patrullas. La Policía Local tardó un montón en llegar”, se quejó.

La mujer agregó que, durante el asalto, el malhechor “hasta se probó ropa de mi marido, pero le dije que ya era suficiente y que se fuera, que ya nos había robado”, y aclaró que el hombre “no fue violento” con ellas. 

Acerca de cómo logró ingresar a la propiedad, detalló que lo hizo “saltando un paredón y entrando después por una ventana”. Por último, comentó: “Tenemos cámaras de seguridad, pero en ese momento no estaban funcionando, por lo que no quedó nada grabado”. 

Agentes de la comisaría Décima, con jurisdicción en la zona y al mando de Germán Rodríguez, de la Jefatura Distrital Norte, investigan lo sucedido para hallar al causante. 

En tanto, peritos de la Policía Científica trabajaron en la escena para dar con algún indicio del hampón, aunque no lograron conseguir material de interés. Por el momento, la causa fue caratulada como “robo” e interviene la Fiscalía Penal en turno. 

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