Trump sacó a Estados Unidos del acuerdo sobre el cambio climático

Los norteamericanos se unen así a Nicaragua y Siria, los únicos dos países no firmantes de los compromisos adoptados en París por casi 200 naciones 

Estados Unidos, uno de los países que más ha contribuido al calentamiento global, abandonará el Acuerdo de París, el principal paraguas para afrontar la lucha contra el cambio climático y uno de los logros diplomáticos más importantes de la historia.

El presidente, Donald Trump , anunció la salida del histórico convenio mediante un breve mensaje en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca, poniendo fin a meses de especulaciones y a una brutal interna en su administración. Su gobierno, dijo, buscará un nuevo acuerdo.

“Para cumplir con mi deber solemne de proteger a Norteamérica y sus ciudadanos, Estados Unidos se retirará del acuerdo climático de París, pero comenzará negociaciones para volver a entrar en el acuerdo de París, o en una transacción completamente nueva, que se dé en términos justos para la nación”, anunció el presidente.

Con su decisión, Trump cumplió una de sus promesas de campaña y le brindó un espaldarazo al ala populista y nacionalista de su gobierno, liderada por su estratega, Stephen K. Bannon, y a los republicanos en el Congreso, que han puesto en duda el vínculo entre el cambio climático y la actividad humana, respaldado por un sólido consenso científico.

Trump decidió sacar a Estados Unidos del acuerdo pese a la presión del G7, China, el Papa Francisco, las Naciones Unidas, los CEO de varias empresas de primera línea del país, todos los demócratas, un puñado de figuras republicanas y su propia hija, Ivanka Trump.

El Acuerdo de París se firmó durante el mandato del expresidente Barack Obama, quien definió ese pacto como “un punto de inflexión” y la “mejor oportunidad” para salvar el planeta.

El objetivo de Estados Unidos, fijado por la administración de Obama, era una reducción del 26% al 28% de las emisiones de gases con efecto invernadero para 2025, con relación al nivel propagado en 2005.

El proceso de la desvinculación

El tema dividió profundamente la cumbre del G7 de la semana pasada en Italia. Todos sus participantes, a excepción de Trump, reafirmaron su compromiso con el texto firmado en París hace poco más de un año.

Trump podría invocar el artículo 28 del acuerdo, que permite a las partes firmantes salir del mismo pero, dado el procedimiento previsto, la salida se haría efectiva únicamente en 2020, ya que ningún miembro que haya ratificado el pacto puede abandonarlo antes de que se cumplan los tres años de su entrada en vigor (noviembre de 2016). A eso hay que sumarle un año más de “preaviso”.

Otra solución, aún más radical, podría ser la salida de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.