Baleado por la espalda

Un joven de 24 años fue atacado en Berisso por dos sujetos armados con un rifle con mira telescópica. En el piso con un tiro en el tórax, lo golpearon hasta fracturarle el maxilar

Con un tiro que le ingresó por la espalda a la altura del pulmón y continúa alojado en su cuerpo, doble fractura de maxilar y contusiones en el rostro, un joven de 24 años pelea por su vida luego de ser atacado  en Berisso durante la madrugada de ayer por dos personas, una de ellas ya detenida, informaron fuentes policiales. 

Casi sobre la medianoche, Ramón Mansilla se encontraba en 24 y 162 norte junto a dos amigos -hermanos  entre sí- cuando se acercaron dos hombres a bordo de un Ford K. Descendieron -uno de ellos, un gremialista de 40 años, con un rifle con mira telescópica- y comenzaron a agredir a la vícitma, quien intentó escapar corriendo. 

Pero lejos de dejarlo huir, sus atacantes fueron tras él y el gremialista le efectuó un disparo por la espalda, que hizo caer a Mansilla. En el piso, fue golpeado por el sujeto de 43 años y su cómplice, de unos 20 y todavía prófugo. A raiz de trompadas y patadas, el damnificado sufrió la fractura del maxilar en dos partes. 

Uno de los amigos de Mansilla, al ver lo que ocurría, tomó una piedra y la impactó contra el K, rompiéndole el parabrisas y logrando que los salvajes abandonen su faena y fueran tras él, para después darse a la fuga. 

El joven fue trasladado al hospital Larraín, donde se encuentra internado en terapia intensiva, en grave estado y con el proyectil alojado en su cuerpo.  

Tras tomar testimonios a testigos y en base a la evidencia recabada a través de cámaras de seguridad, se logró dar con los responsables, por lo que ayer se efectuaron dos órdenes de allanamiento y secuestro en 165, 22 y 23 y otra en 26, 166 y 167. En la primera se logró dar con el gremialista y se incautó la carabina con mira telescópica, un rifle de aire comprimido con tres cajas con municiones y el Ford K.  El acusado quedó detenido por el delito de “tentativa de homicidio, violación de domicilio y amenazas calificadas”. 

La madre de la víctima relató que el imputado había ido anteanoche a su domicilio con la misma arma empleada después, preguntando por su hijo y asegurando que “iba a aparecer muerto en un arroyo”, según relató a Trama Urbana un pesquisa.

Efectivos de la comisaría Primera de Berisso, al mando de Gastón Fernández, tratan de dar con el otro atacante.