Máxima pena por el crimen de la abogada platense

El fiscal y la querella pidieron perpetua. Julia Flammini había sido asesinada cuando viajó a Gualeguaychú por el recital del Indio Solari

En sintonía con lo que habían sido los lineamientos cuando el juicio por el asesinato de la abogada platense Julia Flammini, los alegatos de las partes finalizaron con dos pedidos de condenas a prisión perpetua y otro de absolución para el acusado de este violento crimen.

El Tribunal que en la ciudad de Gualeguaychú está siendo escenario de este proceso pasó a un cuarto intermedio hasta el lunes próximo. Ese día, en horas del mediodía, los jueces Alicia Vivian, Eduardo García Jurado y Mariano López darán a conocer el veredicto para el imputado, un hombre de 39 años de edad llamado Osvaldo Andrés Roldán.

Roldán, que había sido detenido en la ciudad que fuera escenario de este brutal crimen un día después a que el hecho ocurriera en el interior de un bungalow de un complejo termal, tuvo la posibilidad de decir las palabras finales.

Así, afirmó que era ajeno al homicidio y también refirió que “decidí huir porque me sentía asustado”, al aludir a las circunstancias en que fuera arrestado como el presunto autor del hecho por el que ahora está siendo juzgado.

En medio de una Gualeguaychú cargada de gente de todas partes del país por lo que el 12 de abril de este año fue el recital que el Indio Solari brindó en esa ciudad de la provincia de Entre Ríos, dos días antes la joven Julia Flammini fue asesinada.

Ella, al igual que miles de personas, había viajado hasta esa ciudad entrerriana para presenciar el recital. Pero ese mismo jueves 10 de abril en que llegó a un complejo termal ubicado en las afueras de Gualeguaychú, la abogada fue asesinada de varias puñaladas.

Flammini conocía a Roldán. De hecho, habían acordado encontrarse para ver otra vez al Indio, algo que Julia solía hacer cada vez que viajaba desde La Plata hasta el lugar donde el ex líder de los Redondos tocaba.

La abogada trabajaba en el Servicio Penitenciario Bonaerense, labor que la tenía viviendo en La Plata para cuando aquel ya señalado 10 de abril la asesinaron en Gualeguaychú, en el bungalow de un complejo termal donde su cuerpo fue hallado presentando más de sesenta heridas, entre puñaladas y cortes, que le fueron provocadas con un cuchillo tipo “Tramontina”.

“Murió porque no accedió a los deseos sexuales del acusado”

“Julia Flammini murió porque no accedió a los deseos sexuales de Roldán”, dijo en un tramo de lo que fue su alegato el fiscal Lisandro Beherán, funcionario judicial que tuvo a su cargo la instrucción de esta causa y que en representación del Ministerio Público está interviniendo en este juicio oral.

Beherán considera a Roldán autor de un “homicidio doblemente agravado”, tanto “por alevosía como por violencia de género”.

De ahí que ayer finalizara su alocución pidiendo para el imputado la pena máxima que contempla el Código Penal argentino: prisión perpetua.

El Fiscal situó como escenario del crimen el baño de ese bungalow al que Flammini había sido llamada por Roldán, lugar donde a su entender fue asesinada por el imputado porque la joven no accedió a los deseos sexuales del presunto autor de este brutal homicidio.