Monzón amenazaba a su víctima cuando estaba internada

Así lo confirmó una hija de la mujer que fue secuestrada, torturada y violada por el fisicoculturista en una casa de Barrio Norte. Su situación es complicada y se confirmaría su prisión preventiva

Soy Monzón. Estoy libre”. El abusador Néstor Monzón (50), imputado por secuestro y múltiples vejámenes contra una mujer en una casa de Barrio Norte, llamó a una de las hijas mayores de la víctima cuando esta estaba en un hospital, siendo atendida por las heridas sufridas. El detalle, tan siniestro como macabro, lo declaró ayer la hija en sede judicial, y es una prueba contundente del acoso y las amenazas del fisicoculturista, aún cuando la mujer ya se había liberado de su yugo. 

El proceso judicial avanza contra el agresor, a quien la Justicia le confirmaría la prisión preventiva en las próximas horas. También declaró otro hijo menor, en cámara Gesell, por otras llamadas de Monzón. “Mi hermana sigue en shock, no puede hacer fuerza. No se levanta. A veces está hablando con sus hijos y de repente se acuerda de algo y se pone mal. Desde Asistencia a la Víctima le van a asignar un psicólogo”, dijo Javier, hermano de la víctima, en diálogo con Trama Urbana

Los familiares sienten que la investigación comandada por el fiscal Marcelo Martini avanza por buen camino. “Estamos conformes, queremos que este hombre no salga nunca más. Destruyó a una familia, y son hechos que no se tienen que volver a repetir”, enfatizó el pariente, y agregó que “la Justicia está actuando para encontrar a la persona que la entregó, que se encuentra prófuga”. 

La damnificada estuvo secuestrada desde el 29 de octubre hasta el 3 de noviembre en un departamento de 36 entre 13 y 14. Fue el propio acusado quien decidió “tirarla a la calle, como si fuera un objeto”, según un vocero judicial. 

En esos días fue abusada sexualmente y sometida a golpes en todo el cuerpo. Por ahora, la víctima confirmó solamente que el agresor fue Néstor Monzón, aunque se cree que actuaron otras personas. “Pasó por toda serie de vejámenes. El relato del hecho es tan estremecedor que no pude seguir leyéndolo”, dijo el fiscal Martini, quien aseveró que la víctima “llegó al PH de manera circunstancial, contactada por otra persona que la llevó hasta el imputado para obtener un trabajo”.

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